El expresidente hondureño Manuel Zelaya encabezó hoy una marcha de centenares de personas en apoyo a la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), que depende de la OEA, y para pedir el retorno del exministro peruano Juan Jiménez, ex vocero de ese organismo.
EFE
La manifestación, concluyó frente a la sede de la MACCIH, en Tegucigalpa, y fue convocada por Zelaya, coordinador general del Partido Libertad y Refundación (LIBRE) y de la Alianza de Oposición contra la Dictadura.
“Quieren sacar a este organismo internacional, que no goza de todo el agrado de la sociedad hondureña es cierto, pero Libre le dio el beneficio de la duda a la MACCIH y debemos apoyarla para que actúe contra la corrupción y ponga precedentes en este país”, subrayó Zelaya.
Enfatizó que la Misión, que depende de la Organización de Estados Americanos (OEA), cuenta con “el apoyo” de la Alianza de Oposición y Libre para “combatir de frente a la corrupción” y le pidió que “no le tenga miedo a los corruptos que quiere sacarla de Honduras”.
Zelaya solicitó el retornó a Honduras del exministro peruano Juan Jiménez, ex vocero de la MACCIH, quien renunció al organismo en febrero de 2018 por diferencias con el secretario general de la OEA, Luis Almagro.
El expresidente indicó que la sentencia de la Sala de lo Constitucional del Supremo que resolvió que el convenio de creación de la MACCIH es constitucional, “vulnera” el acuerdo firmado por el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, y el secretario general de la OEA, Luis Almagro.
La Sala de lo Constitucional del Supremo resolvió el 30 de mayo por unanimidad que el convenio de creación de la MACCIH, que se instaló en Tegucigalpa el 19 de abril de 2016, se apega a las leyes del país.
Estableció además que “toda acción y acompañamiento en el marco de este Convenio debe ajustarse a los preceptos de la Constitución de la República”.
La Sala de lo Constitucional admitió el 20 de marzo un recurso de inconstitucionalidad contra el acuerdo de creación de la MACCIH presentado por un grupo de abogados que representan a cinco diputados implicados en presuntos actos de corrupción en el Parlamento.
Los manifestantes también protestaron contra el alto costo de los alimentos, combustibles y servicios públicos, especialmente la energía eléctrica.
“Hay un monopolio de los combustibles y de la energía”, subrayó Zelaya ante los manifestantes, que portaban mantas y pancartas con mensajes contra el alza de precios a los productos y servicios, críticas al gobierno hondureño que preside Juan Orlando Hernández.
Algunos de los manifestantes intentaron quebrar los ventanales de varios negocios en un bulevar de Tegucigalpa, cuyas calles quedaron ocupadas por basura, piedras y otro tipo de objetos. EFE