Kim Jong Un abandona Singapur después de su histórica cumbre con Donald Trump

Kim Jong Un abandona Singapur después de su histórica cumbre con Donald Trump

El vehículo que transporta al líder norcoreano Kim Jong Un deja el hotel St Regis en Singapur, el 12 de junio de 2018. REUTERS / Athit Perawongmetha
El vehículo que transporta al líder norcoreano Kim Jong Un deja el hotel St Regis en Singapur, el 12 de junio de 2018. REUTERS / Athit Perawongmetha

 

El líder norcoreano, Kim Jong-un, se llegó hoy al aeropuerto internacional de Singapur para abandonar el país, unas ocho horas después de que acabara su histórica cumbre con el presidente estadounidense, Donald Trump.

La comitiva de Kim se dirigió al aeropuerto singapurense de Changi poco después de las 22:30 (14:30 GMT) para abandonar la ciudad-estado del sudeste asiático, de la que Trump ya había despegado hacia las 18:00 horas (10:00 GMT) rumbo a Estados Unidos.

Se desconoce qué hizo Kim en su hotel desde que abandonó la sede de la cumbre poco después de las 14:00 (06:00 GMT) y hasta que salió rumbo al aeropuerto.

Su histórica cumbre con Trump abrió un nuevo capítulo en las relaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte, y estuvo llena de gestos amistosos y declaraciones optimistas.

Los dos dirigentes se reunieron durante más de cuatro horas en el hotel Capella de la isla de Sentosa, y firmaron una declaración en la que se comprometieron a desarrollar nuevas relaciones para “la promoción de la paz, la prosperidad y la seguridad”.

“El presidente Trump se compromete a ofrecer garantías de seguridad a la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial de Corea del Norte), y el presidente Kim Jong-un reafirmó su firme e inquebrantable compromiso para la desnuclearización de la península de Corea”, reza la declaración conjunta.

El acuerdo, que acaba de momento con el último legado de la Guerra Fría, establece que las negociaciones entre los dos países van a continuar, pero no aporta ni detalles ni un calendario para la buscada desnuclearización de Pyongyang. EFE

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