Por enésima vez, al papa Francisco el viento le jugó una mala pasada y provocó que su solideo volará.
El solideo es un pequeño sombrero de seda que usan los papas y los obispos y sólo se lo quitan ante Dios, es decir, ante el Santísimo Sacramento, o durante la Misa desde el Prefacio hasta después de la Comunión.