La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha recomendando a Venezuela tomar acciones urgentes para detener la transmisión del sarampión y la difteria, así como atender el problema de morbilidad y mortalidad causadas por la malaria.
La organización ofrece, en un documento al que ha tenido acceso Efe, cifras actualizadas de la transmisión de enfermedades como la malaria, el sarampión, la tuberculosis, la difteria y el sida.
Divulgado en la 162 sesión del Comité Ejecutivo de la OPS, que se reunió la semana pasada en Washington, el documento menciona el “aumento significativo” de la malaria en Venezuela desde 2015, cuando se registraron 136.000 casos, que pasaron a 406.000 en 2017.
Esta situación -agrega- ha sido causada principalmente por la migración de personas infectadas en áreas mineras del estado de Bolívar a otras zonas del país.
La escasez o los precios prohibitivos de los fármacos contra la malaria constituyen factores adicionales que han favorecido la propagación de la enfermedad.
La OPS -agencia especializada en salud del Sistema Interamericano y oficina regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud (OMS)- subraya al respecto riesgos relacionados con el aumento de casos de malaria en zonas fronterizas de los países vecinos y con el surgimiento de tipos de malaria resistentes a los antipalúdicos.
Sobre el sarampión, señala que se ha expandido a 21 de los 24 estados del país, y que entre el primer caso, que se detectó en julio de 2017, hasta este mes de junio se han confirmado 2.285 casos, de los que 1.558 corresponden a contagios ocurridos este año
Además, Brasil, Colombia y Ecuador han reportado casos importados de Venezuela.
El documento -titulado “Repuesta de la OPS para el mantenimiento de una agenda de cooperación técnica efectiva en Venezuela”- aborda también la evolución del sida, con una estimación del 24 % de aumento de personas infectadas por el VIH entre 2010 y 2016, y la incapacidad para brindar tratamiento a la mayoría de ellas.
“El Programa Nacional de VIH/SIDA informa de que 69.308 de los 79.467 pacientes de VIH registrados para un tratamiento antirretroviral no lo están recibiendo. Quince de los veinticinco antirretrovirales comprados por el Gobierno están agotados desde hace más de nueve meses”, revela.
De la tuberculosis, la OPS precisa que mientras en 2014 hubo 6.063 casos, la información preliminar disponible para 2017 apunta a que se superaron los 10.000.
Sobre las condiciones para afrontar el aumento de esas enfermedades, la Organización Panamericana de la Salud confirma las dificultades con las que operan muchos hospitales y -citando estimaciones de la Federación Médica Venezolana- señala que unos 22.000 médicos han abandonado el país, lo que representa el 33 % del total.
Los servicios más afectados por esa emigración han sido neonatología, anestesiología, emergencias y cuidados intensivos.
Además, 6.000 bioanalistas y técnicos de laboratorio han emigrado, así como entre 3.000 y 5.000 enfermeros.
“A pesar de esto, el sistema sanitario de Venezuela sigue teniendo una capacidad significativa”, asegura la organización.
Menciona la existencia de una red de 288 hospitales, 421 centros de atención especializada ambulatoria y casi 18.000 centros de atención primaria.
En este contexto, el documento de la OPS pide a Venezuela “implementar acciones urgentes para racionalizar y movilizar los recursos existentes para asegurar el funcionamiento de los servicios hospitalarios”.
Sostiene que esto puede requerir “planes de contingencia, intervenciones para garantizar la retención de la fuerza laboral existente y la disponibilidad de medicinas y suministros esenciales”. EFE