“Ni los muertos pueden descansar en paz”, con esa frase Rosy Bitriago, vecina de la comunidad de “La Pica”, se refiere al estado actual del Cementerio Municipal. El Campo Santo, ubicado en la parroquia Independencia, Municipio Libertador, se encuentra cubierto de maleza, deteriorado y muestra rastros evidentes de profanación de tumbas.
Rosy Bitriago informó que “la media pared perimetral del cementerio es usada por maleantes para acechar a sus víctimas, hay un comercio ilegal con las parcelas, de hecho, sacan a los muertos para meter otro y pueden cobrar hasta 40 millones por eso. Casi todo el cementerio está cubierto por una espesa maleza, son años de descuido y la comunidad siente esto como una injusticia con nuestros muertos”.
Tito de Freitas, abogado y activista de AD, se mostró impresionado con el grado de deterioro de las instalaciones del cementerio y solicitó a las autoridades “mayor atención a estas circunstancias, si las denuncias de muchos vecinos resultan ciertas, estamos en presencia de situaciones que lesionan la dignidad de las familias que tienen allí a sus allegados fallecidos. Hay que ponerse en el lugar de los afectados”.
Nota de Prensa