Las temperaturas en España y Portugal se dispararon hasta niveles casi récord en plena ola de calor en Europa, con los gobiernos poniendo a los servicios de emergencia en alerta por el riesgo de incendios forestales.
La ola de calor en la península ibérica, causada por la entrada de una masa de aire caliente procedente del norte de África, es la más severa desde 2003. En otros puntos del continente, el verano ha traído incendios forestales y sequía a lugares tan distantes como Reino Unido, Escandinavia y Grecia.
Las temperaturas en muchas partes de España y Portugal se mantendrán por encima de los 40 grados Celsius al menos hasta el domingo, y podrían subir otros 2 o 3 grados. Eso podría llevarlas por encima del récord europeo anterior de 48 grados Celsius, establecido en Atenas en 1977.
Los anteriores máximos históricos en España y Portugal fueron de un poco más de 47 grados. En Portugal, medios locales publicaron historias sobre cómo las temperaturas podrían superar a las del Valle de la Muerte en California, uno de los lugares más tórridos del mundo.
Se prevé que varios puntos de la árida región del Alentejo, en el sur del país, alcancen los 47 grados. El país se declaró el jueves en alerta máxima para tratar de evitar que se repitan los peores incendios de su historia del año pasado, que causaron la muerte de 114 personas.
François Jobard, meteorólogo de Meteo France, dijo que la masa de aire caliente del norte de África “posiblemente provocará temperaturas récord en Portugal y España, con 45 grados previstos desde ahora hasta el sábado, e incluso más”.
En el otro extremo del Mediterráneo, Grecia sufrió una serie de incendios forestales que mataron a 91 personas el mes pasado.
Las autoridades españolas han puesto en alerta por ola de calor la mayor parte del centro del país, que se espera dure hasta el domingo con temperaturas de más de 42 grados en algunas partes de Andalucía y Extremadura. Dos hombres murieron por golpe de calor en Murcia.
En Suiza, los ferrocarriles de montaña registraron un incremento en sus usuarios al huir a los Alpes los habitantes de las ciudades. Las autoridades pesqueras del cantón de Zúrich peinaban los riachuelos para evitar la muerte de peces, al secarse las corrientes o caer los niveles de oxígeno.
Más al norte, en Escandinavia, las temperaturas alcanzaron récords hasta hace unos días. En Suecia, julio fue un mes caluroso sin precedentes y hubo incendios forestales en algunas zonas del país. Las autoridades advirtieron sobre el riesgo extremo de incendios forestales de nuevo este fin de semana.
Las autoridades de ambos lados del mar Báltico, en Suecia y Polonia, han advertido además en contra de nadar en sus aguas por una gran proliferación de algas tóxicas que se están propagando por las altas temperaturas.
Portugal libra batalla contra incendios y apagones
Más de 740 bomberos se esforzaban el sábado en las labores de extinción de un incendio forestal en el sur de Portugal con temperaturas casi en niveles récord en la península ibérica, en medio de una ola de calor que ha provocado sequía y fuegos de Grecia a Suecia.
Con el fin de evitar más víctimas después de que 114 personas murieron en dos gigantescos incendios forestales el año pasado en Portugal, protección civil envió alertas por mensaje de texto a teléfonos móviles alertando a la población del riesgo extremo de incendios en varias regiones, incluyendo los alrededores de Lisboa. En Grecia, un incendio forestal mató a 91 personas el mes pasado.
En la costera y turística zona de Cascais, cerca de la capital portuguesa, una sobrecarga de la red eléctrica por el uso intensivo del aire acondicionado causó un apagón el viernes por la noche, dejando a decenas de miles de personas sin electricidad por varias horas y causando el cierre de un gran centro comercial.
En Lisboa, las temperaturas llegaron a alcanzar los 43 centígrados el viernes.
Un incendio comenzó el sábado en la zona montañosa de Monchique, en la turística región del Algarve al sur del país. Las autoridades tuvieron que evacuar dos pueblos y enviaron diez hidroaviones a combatir las llamas.
Una masa de aire caliente procedente del norte de África es la causante de la ola de calor más severa en la península ibérica desde 2003, uno de los peores años en materia de incendios desde que hay registros.
Tres personas murieron esta semana en España por las altas temperaturas. La sequía más larga de las últimas décadas ha drenado los ríos en Holanda y afectado a los agricultores en Alemania. Campos de trigo han sido devastados en el norte de Europa, lo que ha elevado el precio del cereal.
En Escandinavia, las temperaturas han marcado récords hasta hace unos días. Suecia vivió el mes de julio más caluroso de su historia y sufrió incendios forestales en varias partes del país.
Las temperaturas rozaron los 30 grados esta semana en Finlandia, donde el promedio de agosto es de 19 grados. Ante la práctica ausencia de viviendas con aire acondicionado en el país, un supermercado de Helsinki invitó a 100 clientes a dormir en sus instalaciones con aire acondicionado el sábado.