Con extranjeros, Avianca busca mitigar la escasez de pilotos

Con extranjeros, Avianca busca mitigar la escasez de pilotos

 

Le pidió permiso a la Aerocivil para traer a 70 aviadores foráneos, pero solo le aprobaron 20, reseñó El Tiempo.

Los pilotos extranjeros serán de nuevo una de las salidas de Avianca para tratar de superar los efectos de la escasez de estos profesionales en el mercado local y su reciente impase tecnológico, que está cerca de completar dos semanas y ha afectado a más de 33.600 pasajeros por la cancelación de 323 vuelos.

Hace unos días, cientos de aviadores foráneos recibieron la oferta de empleo para el cargo de instructor de la aerolínea colombiana, que les propone un salario mensual de 17.500 dólares, algo más de 50 millones de pesos, el doble de lo que reciben los aviadores locales.

En la convocatoria se detalla que sus servicios se requieren solo por seis meses, el tiempo que la Aeronáutica Civil le autorizó a Avianca para la contratación de pilotos de otros países.

Y mientras su máximo accionista, Germán Efromovich, señaló en entrevista con EL TIEMPO que no había escasez de pilotos, se conoció que la aerolínea le hizo esta petición a mediados de julio a la autoridad aeronáutica, para contratar 70 aviadores extranjeros, pero únicamente le fueron aprobados, el pasado 1.° de agosto, los 20 en mención.

Estos empezarían a trabajar en menos de un mes y reemplazarían a los instructores colombianos que están cubriendo el déficit de 167 pilotos que tiene la empresa.La aerolínea confirmó que los pilotos extranjeros entrenarán a 188 aviadores colombianos que están terminando sus estudios.

Pero el permiso de la Aerocivil tiene la prioridad para que dichos pilotos foráneos enseñen, aunque también pueden volar solamente a ciertas zonas geográficas, principalmente entre ciudades principales y en aviones Airbus de la familia A320, y siempre cumpliendo los requisitos del reglamento aeronáutico (RAC).

Sin embargo, solo podrán comenzar a volar una vez cumplan requisitos como el simulador de vuelo y otros, y presenten la documentación y todos los papeles respectivos a la Aeronáutica Civil. Este año, la Aerocivil ya le ha autorizado a Avianca la contratación de otros diez pilotos foráneos como comandantes e instructores de vuelo, pero solo por períodos de tres meses para operar aviones Boeing 787.

“La Aeronáutica Civil autorizó la llegada de los primeros seis el 3 de abril, y avaló la contratación temporal de otros cuatro aviadores el pasado 13 de julio”.

En comunicaciones dirigidas al presidente de Avianca Holdings, Hernán Rincón, la Aeronáutica Civil autorizó la llegada de los primeros seis el 3 de abril, y avaló la contratación temporal de otros cuatro aviadores el pasado 13 de julio.

Seguimiento al milímetro

Luego de los acontecimientos de los últimos días, también se conoció que la Aerocivil viene haciendo una estricta vigilancia de la operación local de Avianca para que su situación no perjudique el mercado y a todos los viajeros.

Por ejemplo, la semana pasada, la entidad le ordenó devolver el uso de 7.000 franjas horarias de vuelo, de un total de 24.000, pues la compañía no las estaba usando, en perjuicio de otras aerolíneas que podrían tenerlas.

Por ejemplo, si en un vuelo entre Bogotá y Rionegro, Antioquia, Avianca tiene vuelos a las 9, a las 10 y a las 11 de la mañana, se halló que los pasajeros son reubicados en aviones más grandes, afectando sus tiempos de viaje, pero, además, sin soltar un horario que otra empresa podría tomar.

Por esta conducta, de devolver franjas horarias por fuera de plazo, la Aerocivil tiene abiertas cuatro investigaciones contra Avianca y otras cuatro más contra la aerolínea Viva Air.

Adicionalmente, la Aerocivil les dijo a quienes están a cargo de la operación de Avianca que el plan de itinerarios, presentado para la próxima temporada invernal, será aprobado únicamente si demuestra que tiene la capacidad humana y técnica para ejecutarlo y cumplirlo.

La semana pasada, Avianca dio a conocer un plan para normalizar su operación, que incluye un ajuste de los itinerarios y la incorporación de dos aviones Airbus A320 y ocho tripulaciones, provenientes de la operación internacional con baja demanda y que volarán en rutas nacionales.

Todo esto sucede dentro de un marco de escasez global de pilotos y un aumento significativo del número de aerolíneas durante los últimos diez años. Según estudios de entidades aeronáuticas, aerolíneas y fabricantes como Boeing y Airbus, en los próximos 20 años se necesitarán 800.000 aviadores más para atender la demanda de transporte aéreo, especialmente en Europa, Asia y África.

Son justamente las firmas de esos continentes las que están a la caza de los pilotos colombianos, a quienes les están ofreciendo salarios de más de 20.000 dólares mensuales, unos 56 millones de pesos. En Colombia, por el mismo trabajo, un profesional que pilotea el avión más grande gana entre 8.000 y 9.000 dólares, menos de la mitad.

Los pilotos despedidos

Por su parte, la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (Acdac) dice que la mitad de los pilotos despedidos por la huelga ya consiguieron trabajo en otras aerolíneas colombianas y de Asia. Los demás están en procesos de selección, entrenamiento y recertificación.

Nicolás Uribe, por ejemplo, es un capitán de 30 años que llevaba una década trabajando en Avianca y, por haber participado activamente en la huelga, fue uno de los primeros despedidos. Un mes después de su despido fue convocado para un proceso de selección en Indigo Airlines, una aerolínea asiática muy interesada en el capital humano nacional.

“Los pilotos colombianos hablamos perfectamente inglés, somos muy aplicados y hemos sido entrenados en condiciones meteorológicas y topográficas particularmente especiales”.

“Los pilotos colombianos hablamos perfectamente inglés, somos muy aplicados y hemos sido entrenados en condiciones meteorológicas y topográficas particularmente especiales. Todo eso nos hace competentes para trabajar en cualquier parte del mundo”, cuenta Uribe.

Algunos aviadores explicaron que, por la falta de pilotos, hay casos de dobles asignaciones. Por regulación, los pilotos no pueden volar más de 12 horas diarias y deben descansar en el sitio donde estén cuando vence el tiempo de servicio. Es en ese momento cuando se genera la cadena de fallas que termina afectando al usuario.

El largo viaje para convertirse en piloto

En Colombia solo hay seis escuelas de aviación que cuentan con el aval de la Aeronáutica Civil. En ellas, el valor promedio de toda la carrera supera los 140 millones de pesos, y esta tiene una duración de 750 horas en tierra y 200 más de vuelo (durante un año y medio), lo cual quiere decir que los interesados tienen que pagar casi 50 millones de pesos por semestre. Justamente por los altos costos, las escuelas gradúan tan solo a 300 aviadores cada año.

Si el deseo de los egresados es entrar a una línea de transporte aéreo comercial, lo tienen que hacer como copilotos de aviones ATR y A320. Si quieren empezar a pilotar una aeronave del mismo tamaño o más grande, deben hacer un curso obligatorio de seis meses, pagado por la aerolínea.

Para formar un comandante se requiere una experiencia de copiloto de aproximadamente 3.000 horas de vuelo, lo cual se traduce en siete años de trabajo y una inversión aproximada de 200.000 dólares (casi 600 millones de pesos) en entrenamiento. Por eso, en las aerolíneas colombianas reposan cientos de hojas de vida de copilotos sin experiencia.

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