El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, aterrizó este miércoles en Bogotá para comenzar una visita a Colombia en la que se reunirá con diversas autoridades y conocerá de primera mano la crisis migratoria venezolana y su impacto en los países de la región.
Nada más aterrizar en el aeropuerto internacional El Dorado de Bogotá, Almagro dijo a periodistas que el éxodo de venezolanos “es una tragedia humana incalculable, de una dimensión que es inaceptable, en términos morales y políticos”.
Según estimaciones de la ONU, 2,3 millones de venezolanos se han visto obligados a abandonar su país ante la crisis sociopolítica que allí se vive.
De ellos, cerca de un millón se han instalado en Colombia, país al que 35.000 venezolanos cruzan cada día, muchos en busca de bienes de primera necesidad y otros para emigrar de forma definitiva.
A su llegada a Bogotá, Almagro fue recibido por el director de Asuntos Políticos de la Cancillería, embajador José Renato Salazar, y desarrollará una agenda de trabajo en Colombia, que incluye una reunión con el presidente Iván Duque Márquez y una visita a la ciudad de Cúcuta, principal paso fronterizo con Venezuela.
Almagro estará acompañado por los políticos venezolanos David Smolansky y Betilde Muñoz-Pogossian, coordinadores del grupo técnico de la OEA que visitará las fronteras de los países que reciben inmigrantes y luego elaborará un informe en el que se definirán los mecanismos de cooperación.
En la visita también estará acompañado por el jefe de la misión de la OEA en Colombia, Roberto Menéndez, y el director de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco.
El viernes, la delegación de la OEA visitará Cúcuta, ciudad fronteriza en la que se reunirá con las autoridades de esa zona para hablar del impacto de la crisis y la asistencia humanitaria requerida allí para atender la situación.
Precisamente el presidente Duque afirmó hoy que la OEA debe ser la entidad que lidere la respuesta al éxodo de venezolanos.
EFE