Una intervención militar extranjera en Venezuela tendría “efectos nefastos para la región”, pues el ELN, única guerrilla activa en Colombia e inmersa en un proceso de paz en suspenso, retomaría las armas y participaría en la guerra civil que se desataría en el país vecino, advierte el ex guerrillero y gestor de paz colombiano Carlos Arturo Velandia.
EFE
En un artículo publicado hoy en Firmas de EFE (al que se accede a través de www.efeservicios.com), Velandia responde a las voces que reclaman acabar con el Gobierno venezolano mediante el uso de la fuerza, y que han generado una gran polémica en la Asamblea General de la ONU y en toda Latinoamérica.
“Frente a la hipotética ocurrencia del derrocamiento del gobierno del presidente (Nicolás) Maduro, si es por la vía de la fractura del bloque de poder, habrá una confrontación abierta por parte de las distintas facciones en disputa, que podrá adquirir la forma de guerra civil”, dice Velandia, ex comandante del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y designado por el expresidente colombiano Juan Manuel Santos gestor de paz en los diálogos con ese grupo armado.
Velandia mantiene actualmente la designación de “gestor de paz”, pese a que el diálogo con el ELN está en suspenso desde que el conservador Iván Duque asumió la Presidencia de Colombia el pasado agosto.
El autor del artículo titulado “La tormenta perfecta” tiene claro que “el ELN, cuya fuerza mayoritaria, en un 70%, está sobre la frontera y la transfrontera, producto de una presencia sostenida de más de 40 años, será absorbida por ese estallido para ponerse del lado de la facción que defienda la vertiente histórica de la ‘Revolución Bolivariana‘ o del ‘Chavismo‘ puro”.
Esa situación afectaría de forma directa a Colombia, “un Estado en el que la paz aún hace esfuerzos por nacer y la guerra se resiste a morir”, indica, en alusión a la firma de la paz con las FARC durante el Gobierno de Santos (2010-2018).
“Las fuerzas insurgentes del ELN se pondrán bajo las órdenes de la defensa de la revolución bolivariana y del país, e incluso estarían dispuestas a combatir a las fuerzas militares colombianas, si fueran estas las que estuvieran comprometidas en esa intervención”, matiza Velandia, quien tras casi diez años en la cárcel abandonó la guerrilla para trabajar por la paz.
“Se está creando el ambiente para la tormenta perfecta, que solo podrá desactivarse con un sacudón de racionalidad”, insiste el gestor de paz, al abogar por darle un tratamiento político-diplomático a la crisis de Venezuela y por retomar el dialogo en el caso del ELN en Colombia.
Velandia critica, además, que “el Gobierno colombiano, en abierta confrontación política y diplomática con el venezolano, ha permitido que destacados funcionarios deslicen en el ambiente la posibilidad de una intervención militar extranjera en Venezuela”, pese a las nefastas consecuencias que esa decisión tendría para la región.