Un equipo de ginecólogos ha conseguido que mujeres con menopausia precoz se hayan quedado embarazadas, una de las cuales ya ha tenido un bebé sano, mediante una técnica pionera realizada en el Hospital Clinic de Barcelona.
Según explicó hoy en rueda de prensa el ginecólogo del Clinic Francesc Fàbregues, la técnica “todavía es un ensayo clínico” y se ha experimentado con doce mujeres que han sufrido la menopausia en edades temprana.
Fàbregues detalló que la nueva técnica, publicada en la revista “Journal of Ovarian Research”, consiste en una laparoscopia para extirpar una parte del córtex (corteza) ovárico, que posteriormente es fragmentado y reinsertado en el ovario de la paciente.
Tras esta intervención, se estimula hormonalmente a la mujer durante unas semanas para obtener ovocitos, que luego son fecundados “in vitro”.
El ginecólogo explicó que la técnica se ha aplicado a doce mujeres con menopausia avanzada -una anomalía que afecta al 1 % de las mujeres-, la mitad de las cuales consiguieron tener actividad ovárica tras la intervención.
La activación de la ovulación con pacientes con menopausia precoz fue introducida por un grupo de médicos japoneses que realizaban dos intervenciones quirúrgicas: una para extraer el tejido ovárico, que se fragmenta y, posteriormente, se activa con fármacos durante 48 horas, y otra en la que se reimplanta este tejido en un ovario.
“A diferencia de los japoneses, que hacen la operación utilizando fármacos y con dos intervenciones, nosotros lo hacemos con una sola intervención y sin utilizar fármacos”, explicó Fàbregues, ya que el objetivo de su ensayo era “simplificar, optimizar y hacer viable” el proceso que ya se utilizaba en Japón.
La madre del bebé nacido a través de este método intentó tener hijos durante dos años con diversas técnicas de fertilidad, después de ser diagnosticada de menopausia precoz, y había perdido la esperanza de ser madre.
La menopausia avanzada afecta a las mujeres menores de 40 años y se produce cuando una mujer nace con una reserva menor de folículos ováricos, las células que rodean a los óvulos durante la maduración, o se consumen más rápidamente.
Según el doctor Fàbregues, el equipo cree que “el procedimiento activa a los folículos dormidos que aún tiene la mujer, más que generar otros nuevos”.
El procedimiento todavía se encuentra en un estado de ensayo clínico y, por tanto, los expertos no tienen un perfil exacto de las mujeres que se podrían beneficiar en un futuro de este tipo de intervenciones, que podría afectar a mujeres con estadios previos a la menopausia. EFE