El coordinador general de la Mesa social de Caracas, Benito Urrea, calificó como una “verdadera estafa” la pretensión del presidente Nicolás Maduro de instaurar la idea de un Estado comunal cuya base serían los autogobiernos de las comunas “electos a mano alzada, en votaciones de segundo grado, en donde únicamente votan los voceros de consejos comunales que respaldan el régimen. Es decir, que votarán los que cobran y contarán los votos los que pagan, acabando con el sistema político tal como lo conocemos hoy”.
Nota de Prensa
Explicó que el Gobierno nacional asegura haber constituido alrededor de unas 2.500 comunas sobre una base sociopolítica de 47.000 consejos comunales en todo el país, instancias que aunque el propio Jefe de Estado define como “democracia verdadera” a su juicio, se han podido lograr “desconociendo de una manera arbitraria los derechos políticos de los ciudadanos”, consagrados en la Constitución vigente, “cuando se niega el registro de organizaciones con directivos legítimamente electos, si no están de acuerdo con los objetivos de la Ley orgánica de los consejos comunales, como lo son servir de instrumento para construir el nuevo modelo de sociedad socialista y servir como la base sociopolítica de la misma”.
Advirtió que el presidente Nicolás Maduro “dio una estocada final a la democracia venezolana” el pasado domingo cuando en su discurso con motivo de clausurar el Congreso de Comunas y Movimientos Sociales, “ordenó a la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente elevar las leyes orgánicas del poder popular a la categoría de Leyes Constitucionales”, las cuales, pasarían a ser superiores a las leyes orgánicas y solo podrían ser modificadas por una nueva constituyente,”Una vez más se sorprende a la sociedad venezolana, sin darle tiempo ni oportunidad para informarse, asimilar y debatir un tema tan grueso como es el de montar un régimen comunista, sin disparar un solo tiro”.
Para el dirigente vecinal, el anuncio presidencial es una acción que busca “realizar una avanzada de guerra para capturar territorios leales a la revolución” a fin de sustituir el modelo político de la democracia representativa, definida en la actual Carta magna, en la que todas las autoridades nacionales, regionales y municipales son electas en elecciones de primer grado, mediante el sufragio universal, directo y secreto.
“Yo le pregunto a los habitantes de todos los territorios donde el gobierno afirma haber constituido sus comunas, si alguien que no sea miembro de alguno de los partidos políticos del polo patriótico, ¿ha sido llamado a votar en el referéndum que, según ordena la Ley Orgánica de las Comunas?” algo que precisó debe realizarse para aprobar su creación. “Yo, por lo menos, no lo he visto en mi comunidad, donde ya se ha creado una de estas instancias de poder popular”, enfatizó.
Deploró que la posible constitucionalización de las leyes del poder popular la realice una “Asamblea nacional constituyente ilegítima, ilegal e inconstitucional que se eligió en contra de la Constitución vigente” cuando no fue consultada la población acerca de que si querían convocarla o no y donde además, “se violó gravemente el derecho de los electores al voto universal directo y secreto para la escogencia de unos constituyentes de los que ni siquiera se sabe, cuántos votos sacaron para ser electos”.