Frente a las protestas, principalmente de la UEFA, que provocaron sus proyectos de Mundial de Clubes reformado y de Liga Mundial de Naciones, el presidente de la FIFA Gianni Infantino tuvo que temporizar este viernes en Kigali, aceptando la creación de una comisión para estudiar la viabilidad de las nuevas competiciones.
Candidato a la reelección al frente de la FIFA en junio de 2019 en París, Infantino esperaba que sus propuestas fueran adoptadas en la capital de Ruanda, para enriquecer su balance, que todavía no convence a buena parte de los actores del fútbol mundial.
El dirigente italo-suizo tuvo que recular ante la oposición que encontraron sus propuestas, especialmente por parte de la UEFA, que denunció un proceso precipitado y falto de transparencia.
“Tomamos la decisión de establecer una comisión para reforzar el proceso de consulta en relación a la perspectiva de un Mundial de Clubes renovado y de una Liga Mundial de Naciones”, declaró Infantino en una conferencia de prensa.
Esta comisión ofrecerá sus conclusiones en marzo en Miami, durante la próxima reunión del consejo de la FIFA, órgano de gobierno del fútbol mundial compuesto por 37 miembros.
Los opositores a las reformas critican el riesgo de un calendario sobrecargado y acusan a Infantino de querer sacar adelante los proyectos a la fuerza.
Oposición de la UEFA
Las conversaciones han tenido episodios de tensión en Kigali. El Fórum Mundial de las Ligas (WLF), liderado por su directorio, compuesto por el dirigente de la potente liga inglesa Richard Scudamore, por el director general de la liga alemana Christian Seifert y del patrón de la liga mexicana Enrique Bonilla, señaló esta semana que no había sido consultado.
Pero fue la oposición de la UEFA la que hizo que Infantino diera un paso atrás en sus aspiraciones durante el presente consejo de la FIFA.
“Ayer por la noche (jueves), durante las conversaciones, la UEFA amenazó de esta forma: ‘Si esto es así (aprobación de las nuevas competiciones), abandonamos la reunión’. Por lo que Infantino dio media vuelta y decidió pasar por un ‘task force’, lo que podía haber hecho desde el principio”, indicó a la AFP una fuente próxima a la FIFA.
La UEFA teme que estas nuevas competiciones hagan sombra a la Liga de Campeones y a su nueva Liga de Naciones. Según la misma fuente, además a la FIFA le gustaría recuperar la comercialización de los derechos de todas las Ligas de Naciones.
Infantino entonó una suerte de ‘mea culpa’. “Los seis últimos meses, realizamos consultas, hablamos con las partes que tienen puntos de vista diferentes, opiniones diferentes, y lo importante es que esas opiniones, esos puntos de vista, serán ahora conjuntos”, declaró.
“¿Podría haber hecho las cosas mejor? Ciertamente, ciertamente. Pero intentaremos lograrlo a partir de ahora”, afirmó.
En contra del Barcelona-Girona en USA
Infantino sueña con lanzar de la mano de la Liga de Naciones Mundial una especie de ‘mini Mundial’, que reagruparía cada dos años a ocho selecciones nacionales. Y desea asimismo relanzar el interés sobre el Mundial de Clubes, competición que se disputa cada año en diciembre con siete clubes, y que despierta escaso interés mediático en Europa.
Según lo filtrado a la prensa, Infantino aspira a un nuevo formato; con 24 clubes, 12 de ellos europeos, se jugaría cada cuatro años. Esta nueva competición ocuparía el lugar de la Copa de las Confederaciones, que se disputa un año antes del Mundial.
“Estamos abiertos a toda idea o propuesta”, advirtió Infantino. La comisión para estudiar propuestas estará bajo supervisión del consejo, al que pertenecen los presidentes de las Confederaciones.
En Kigali el consejo de la FIFA aprobó además las recomendaciones de un grupo de trabajo sobre la reforma del mercado de fichajes, con la recuperación de la licencia de agente de jugador y la limitación las cesiones de los futbolistas.
También se decidió acordar una compensación económica de 50 millones de dólares (44 millones de euros) a los equipos que participen en el Mundial femenino de Francia 2019, una cantidad tres veces superior a la que se ofreció en 2015.
Finalmente Infantino señaló que la FIFA está en contra de los planes del campeonato español de deslocalizar el partido entre el Girona y el FC Barcelona en Estados Unidos.
“Siguiendo una petición de orientación de la Federación Española, US Soccer y la CONCACAF, el consejo recalca el principio deportivo por el que los partidos de una liga deben disputarse dentro del territorio del respectivo miembro de la FIFA”, señaló el presidente de la FIFA.
AFP