Una foto viral que recorre Twitter ha sacado a la luz la existencia de una criatura extraña que se encuentra en las selvas tropicales de Ecuador, e incluso los aracnófobos pueden sentirse en conflicto por esto.
El Bunny Harvestman cuenta con ocho patas amarillas delgadas, no muy diferentes de los muchos otros miembros de su familia.
Pero, también tiene lo que parece ser la cabeza de un perro negro, con brillantes ojos amarillos, injertados en la parte superior.
Su nueva fama ha provocado debates en línea sobre si el extraño arácnido debe considerarse adorable o espeluznante, y ha enviado a muchos usuarios de redes sociales a verificar que no se trata simplemente de un truco de Photoshop.
El fotógrafo Andreas Kay documentó la inusual especie de cosechador (también conocido como piernas largas de papi) en la selva amazónica en 2017.
Si bien su nombre científico es Metagryne bicolumnata, el pequeño arácnido se conoce como el cosechador de conejitos debido a su apariencia.
Y a pesar de su aspecto un tanto intimidante, es completamente inofensivo.
Las fotos en primer plano crean la impresión de que el conejero es bastante grande, pero en realidad no es tan grande como una uña humana.
También carece de glándulas venenosas.
Sin embargo, debido a sus características contrastantes y su caricatura, Internet simplemente no puede tener suficiente de este arácnido.
“Esta es una foto real de un arácnido vivo real, un primo de las arañas, llamado el conejero”, escribió el escritor de ciencia Ferris Jabr junto a una de las fotos de Kay la semana pasada, lo que generó un gran interés.
“Pero claramente debería llamarse The Grim”, agregó Jabr, en un gesto con la cabeza a un siniestro símbolo de perro de la serie de Harry Potter.
No está claro para qué sirven exactamente las características que no coinciden, pero los expertos sospechan que es un mecanismo de defensa.
Los “ojos” amarillos que se ven justo debajo de las “orejas” con forma de conejito del arácnido no son en realidad ojos, sino manchas oculares engañosas.
Los ojos reales se pueden ver debajo de estos puntos, como diminutos pinchazos negros.
“Tal vez las manchas en los ojos y las protuberancias similares a las orejas estén destinadas a engañar a los depredadores para que piensen que la criatura es más grande de lo que realmente es”, escribió Kay en un blog sobre el descubrimiento el año pasado.
En cualquier caso, incluso los científicos están de acuerdo en que es diferente a todo lo que hemos visto antes.
Fuente: DailyMail