Varios miembros del Gobierno británico habían manifestado desde un principio sus dudas sobre el plan del “brexit” (salida del Reino Unido de la UE), propuesto por la primera ministra, Theresa May, el pasado julio en una reunión en su residencia de campo, revela este lunes la BBC.
El plan, llamado “Chequers” al haberse alcanzado por el Gobierno en esa casa a las afueras de Londres, fue calificado por varios ministros como “preocupante”, “decepcionante” e “inquietante”.
La propuesta, no aceptada por la Unión Europea (UE), contempla crear un área de libre comercio para bienes después del “brexit”, lo que evitaría los controles de aduanas y mantendría abierta la frontera entre Irlanda del Norte y la República del Norte.
Después de que May divulgara el plan, el entonces ministro para “brexit”, David Davis, presentó su dimisión y poco después lo hizo Boris Johnson como titular de Asuntos Exteriores.
Las revelaciones de hoy ponen de manifiesto las dificultades que afronta la primera ministra para conseguir un acuerdo que sea aceptado por todas las partes cuando faltan apenas cuatro meses para la retirada del Reino Unido del bloque europeo.
Davis y Johnson han criticado “Chequers” por considerar que el Reino Unido estaría ligado a los otros 27 y haría difícil negociar acuerdos comerciales con países fuera del bloque europeo.
En julio, May había indicado que el Gobierno había conseguido un acuerdo aceptado en forma “colectiva”, sin embargo la BBC afirma hoy que hubo dudas “extendidas” entre los ministros, entre ellos el titular de Comercio Internacional, Liam Fox, y el ministro de Interior, Sajid Javid.
El viernes, el hermano de Johnson, Jo Johnson, dimitió como secretario de Estado de Transporte por su desacuerdo con el plan del “brexit” que defiende la primera ministra.
“Lo que se está proponiendo no será nada parecido a lo que se prometió hace dos años”, cuando el 51,9 % de los votantes optaron por abandonar la UE en un referéndum, afirmó Johnson, que está a favor de celebrar un segundo referéndum.
May ha mostrado a sus ministros un borrador inacabado del acuerdo que espera firmar con Bruselas, si bien todavía queda por incluir en ese documento una cláusula para asegurar que no se levanta una frontera en Irlanda del Norte, la cuestión que ha mantenido encalladas las negociaciones hasta ahora.
EFE