La segunda cita regional sobre migración venezolana abordará el problema de la xenofobia y las necesidades de financiamiento para atender a quienes huyen de la crisis en Venezuela, dijo el jueves el viceministro ecuatoriano de movilidad humana, Santiago Chávez.
“En la región tenemos dificultades porque se está incrementando el tema de la xenofobia”, comentó a la AFP Chávez, antes del encuentro que se realizará en Quito el 22 y 23 de noviembre.
“Los gobiernos debemos trabajar intensamente y de manera coordinada con los organismos internacionales para explicar a la gente que el migrante no es el culpable de esta situación”, agregó.
Además de los brotes de xenofobia también se abordará el tema del financiamiento para atender el inusual flujo de venezolanos, que se concentra principalmente en Colombia, Perú y Ecuador.
Aunque todavía no hay un monto definido en cuanto a las necesidades que tienen los países de acogida, Chávez sostuvo que el financiamiento que pretenden conseguir se usará “para la inserción de los ciudadanos venezolanos”.
“Es un deber tratar de sensibilizar a la comunidad internacional y también que ellos asuman una cierta corresponsabilidad porque es un problema que atañe a todos”, apuntó el funcionario.
Según cifras de la ONU, desde 2015 al menos 2,3 millones de personas dejaron Venezuela, huyendo de la grave crisis económica y política que enfrenta ese país.
Autoridades colombianas estiman que a ese país han llegado cerca de un millón de personas desde Venezuela en los últimos años. Perú calcula que desde enero de 2017 entraron a su territorio unos 550.000 venezolanos.
En Ecuador, Chávez estima que habitan unos 300.000 ciudadanos de esa nacionalidad. Aunque el número de ingresos ha bajado a 2.000 diarios, el país mantiene la emergencia migratoria que declaró en agosto, cuando recibió al menos 5.200 venezolanos por día.
“Ecuador quizá en un inicio podía haber sido un país de tránsito, pero ahora es un país de acogida”, indicó.
A la cita -a la que está invitada Venezuela y se sumó Guatemala- acudirán representantes del Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento.
A Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Chile, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay que acudieron a la primera reunión en septiembre, se sumarán esta vez países observadores como Estados Unidos, Alemania, Italia, Francia y España.
Esas naciones son “potenciales donantes”, apuntó Chávez, quien lamentó que “no ha progresado” el llamado que hicieron al presidente venezolano Nicolás Maduro para que acepte ayuda humanitaria al concluir la primera reunión.
Sin embargo, confió en que enviado especial de la ONU sobre el éxodo venezolano, Eduardo Stein, abrirá canales de diálogo con el gobierno de ese país.
AFP