Una gran congestión se vio este viernes en el Terminal de Pasajeros de San Cristóbal, formada especialmente por aquellos pasajeros con rumbo a la frontera, la cual se adjudicó al Black Friday de Cúcuta, una jornada de ofertas comerciales, en la que supuestamente se ofrecía hasta un 50% en descuentos en varios productos, a excepción de la comida y las medicinas, publica La Nación.
Sin embargo, dentro de la cola, los pasajeros más que sentirse atraídos por ese gancho publicitario, sostuvieron que el motivo de su viaje era que no solo conseguir productos de la canasta básica escasos en nuestras tiendas y supermercados, sino a precios algo más económicos, como la harina de maíz y trigo, el arroz, mantequilla y el azúcar entre otros. Y por supuesto, no faltaron
De otro lado en muchos más el interés por la salud que por la frivolidad era la principal motivación para dirigirse a Cúcuta. Rosa Sandoval requería urgentemente su tratamiento de la artritis, que ya hace más de seis meses lo han pedido sin obtener respuesta a través del 0800-SaludYa; a Herminia Guzmánya se le venció el marcapasos y necesita verse urgente con un cardiólogo.
No faltaron los que por los repuestos para sus vehículos o aparatos mecánicos se aguantaban sus dos o tres horas de cola.
Otros sencillamente van a visitar a sus familiares, y se mostraron escépticos respecto al Black Friday. Alguien quien prefirió no dar su nombre, iba a Cúcuta a recibir a su hija que regresaba de Medellín con sus tres hijos pequeños, porque no pudo conseguir ninguna fuente de ingresos
Una larga fila que rodeaba toda el área de carga del Terminal de Pasajeros, llena de historias contenidas en maletas y bolsos.
Las busetas que no daban abasto al flujo de pasajeros estaban cobrando 100 Bs.F; sin embargo, quien deseará llegar más rápido y más cómodo en el transporte pirata debía pagar hasta 1200 Bs.F un poco más de la mitad del ingreso mínimo integral en Venezuela.
Freddy Omar Durán