Unos 30 periodistas en todo el mundo han sido asesinados a manos de las mafias en los últimos dos años, denunció Reporteros Sin Fronteras (RSF), que alertó de que fueron víctimas de represalias por sus trabajos de investigación y de la falta de protección de las autoridades.
En una conferencia de prensa, periodistas de investigación de distintos países fueron invitados, junto con el secretario general de RSF, Christophe Deloire, a presentar las cifras, calificadas de “aterradoras” por la organización.
“En los dos últimos años, treinta periodistas, incluso más, han sido asesinados en el mundo debido a sus investigaciones”, sostuvo Deloire.
Y en lo que va de año, doce periodistas han sido asesinados por diferentes grupos mafiosos como represalia por su trabajo de investigación. “A esta cifra podrían sumarse al menos cuatro casos de periodistas asesinados en México que aún se están investigando”, afirma RSF en el informe “Los periodistas, bestias negras de la mafia”.
La organización cree que la cifra en ese país americano “podría verse incrementada” debido a la connivencia entre “mafiosos y políticos que se mezclan o se alían para hacer callar a los periodistas”, además de la ineficacia de la “lenta” justicia que “arresta a falsos culpables” o “no abre investigaciones”.
Y apuntó que, desde 2012, al menos 32 periodistas mexicanos han sido asesinados por los cárteles. México, que ocupa el lugar 147 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de RSF, es uno de los países más peligrosos para el ejercicio periodístico.
El informe también destacó la situación que desde enero de 2018 se vive en la provincia de Esmeraldas (Colombia), escenario de constantes enfrentamientos entre los narcotraficantes y las autoridades.
RSF recordó el secuestro y posterior asesinato este año por el “Frente Oliver Sinisterra” -disidente de las FARC- del reportero Javier Ortega, el fotógrafo Paul Rivas y el conductor del vehículo, Efraín Segarra, que trabajaban para el diario ecuatoriano “El Comercio”.
“En 2017, al menos catorce periodistas fueron asesinados por grupos pertenecientes a la mafia o que presuntamente tenían relaciones con redes criminales”, alertaron.
“Registramos cinco casos de intento de asesinato de periodistas, en los que los autores materiales e intelectuales eran miembros de la mafia, sin contar las numerosas agresiones y amenazas así como la destrucción de medios de comunicación”, desvelaron.
En Europa, tres son los países “golpeados por la mafia en menos de un año”: Eslovaquia, Malta e Italia.
Reporteros Sin Fronteras denunció la situación de riesgo en la que encuentran casi doscientos profesionales italianos, de los que diecinueve necesitan a día de hoy protección personal.
Es el caso de reporteros amenazados como Federica Angeli y Paolo Borrometi que llevan, respectivamente, tres y cuatro años bajo protección policial por sus investigaciones sobre la mafia italiana.
“Borrometi estaba invitado a venir pero, desgraciadamente, no ha podido estar con nosotros porque no había forma de garantizar su seguridad en Francia”, aseguró Deloire, que recordó las duras condiciones personales en las que está el reportero.
En la rueda de prensa también destacaron el caso del periodista Jan Kuciak, asesinado junto a su novia en febrero pasado en Eslovaquia, país en el que, afirma RSF, su integración a la Unión Europea (2004) no han puesto fin a las amenazas contra los periodistas.
Desde RSF, también se citó a la periodista maltesa Daphne Caruana Galizia, una de las reporteras que más activamente participó en la investigación de los llamados “Papeles de Malta”.
RSF alertó de que la violencia mafiosa contra periodistas es un hecho generalizado en todo el mundo, presente en países como Rusia, Turquía o Camboya, pero otros como Francia, Holanda o Japón tampoco “escapan de esta situación”.
EFE