El análisis de las cajas negras del Boeing 737 MAX de Ethiopian Airlines, que se estrelló el domingo matando a 157 personas, comenzó este viernes en Francia, país al que Etiopía encargó la investigación para intentar descubrir las causas del siniestro.
“La delegación etíope encabezada por el jefe de la Oficina de Investigación de Accidentes (etíope) ha llegado a la Oficina Francesa de Investigación y Análisis y el proceso de análisis ha comenzado en París”, anunció Ethiopian Airlines en Twitter.
An Ethiopian delegation led by Accident Investigation Bureau(AIB) has flown the Flight Data Recorder (FDR) and Cockpit Voice Recorder (CVR) to Paris, France for investigation.
— Ethiopian Airlines (@flyethiopian) March 14, 2019
Etiopía, que no dispone de un laboratorio de análisis, confió el análisis de las cajas negras a la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil de Francia (BEA, por sus siglas en francés).
El organismo estadounidense encargado de la seguridad en los transportes (NTSB) mandó a tres investigadores a Francia para participar en las pesquisas, una práctica habitual puesto que el avión es del constructor estadounidense Boeing.
El Boeing 737 MAX de Ethiopian Airlines, que solo tenía cuatro meses de antigüedad, se estrelló minutos después de despegar de Adís Abeba el domingo. El avión iba rumbo a Kenia.
Tras el accidente, se ha prohibido el uso del Boeing MAX en todo el mundo puesto que se trata del segundo accidente que involucra a este modelo de avión en cinco meses.
Boeing anunció el jueves la suspensión de las entregas de los aviones 737 MAX “hasta que se encuentre una solución”, pero descartó reducir la producción de la aeronave.
La serie MAX es el modelo más vendido de Boeing, pero aún es relativamente nuevo.
Según la FAA, hay 74 aviones de este tipo registrados en Estados Unidos. En el mundo hay 387 en 59 distintas aerolíneas.
Piloto en situación de emergencia
Las autoridades estadounidenses aseguraron el miércoles que nuevas pruebas mostraron similitudes entre el accidente de Ethiopian Airlines y el de Lion Air en Indonesia, en el que murieron 189 personas en octubre pasado.
La Agencia estadounidense de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) ordenó suspender todos los vuelos de las aeronaves 737 MAX 8 y MAX 9 hasta nuevo aviso.
La medida se produjo después de que un número creciente de aerolíneas y países decidieran dejar en tierra esos modelos de avión o prohibirlos en su espacio aéreo, hasta que se asegure que no representan un problema de seguridad.
Según reveló el New York Times el jueves, el piloto del Boeing 737 MAX de Ethiopian Airlines se encontró en una situación de emergencia inmediatamente después del despegue. Pidió con voz de “pánico” regresar cuando el avión comenzó a acelerar a una velocidad anormal.
“Break, break, solicito vuelta a casa”, dijo el comandante a los controladores de tráfico aéreo, según una persona que tuvo acceso al intercambio entre la tripulación y los controladores.
El término “break, break”, se utiliza para dar prioridad a un mensaje, lo que significa que la tripulación se enfrenta a una situación de emergencia que los pilotos no pueden manejar. “Solicita orientación para aterrizar”, agregó el comandante.
Antes del accidente de Ethiopian Airlines, pilotos estadounidenses habían registrado sus preocupaciones sobre cómo se comportaba el MAX 8.
Hechas para resistir choques
Por el momento se desconoce si los especialistas franceses podrán o no recuperar la información que contienen las cajas negras. El responsable interino del FAA, Dan Elwell, dijo el miércoles que “sufrieron daños” durante el impacto.
Pero, para la BEA, estas grabadoras de vuelo están hechas para resistir choques extremos por lo que nada indica que no puedan ser analizadas.
Los investigadores franceses intentarán recuperar la información de los registros de voz y datos de la cabina de vuelo.
La información que contienen las cajas negras ayuda a explicar el 90% de los accidentes, según expertos de aviación.
Las acciones de Boeing han caído un 12% desde el accidente en Etiopía, lo que representa un valor de 30.000 millones de dólares del valor de la empresa en bolsa. AFP