VERDADES Y RUMORES ¿#VamosBien? O ¿#NoVamosBien?
Por Darwin Chávez
PARTE DE GUERRA. Nunca ha sido fácil entender las particularidades de la crisis venezolana. Pero ahora menos que nunca es fácil comprender el tremendo enredo que es la situación nacional. Y es mucho menos probable que cualquiera pueda entender porque es tan complicado encontrar una salida satisfactoria que permita encauzar la anhelada transición. Venezuela es el caso atípico de un Estado fallido que está secuestrado por un grupo de sujetos que están implicados en múltiples delitos nacionales e internacionales, algunos con acusaciones de haber cometido crímenes de lesa humanidad que no prescriben, y que por tanto ven al poder como su única salvación ante el asedio internacional. Eso ocurre mientras todo un país vive en medio de la peor calamidad conocida, ahora maximizada por la crisis eléctrica la que, por cierto, será por un período muy largo. En medio de la tragedia es complicado que la mayoría de los venezolanos piense con tranquilidad y mantenga el optimismo. Hay impaciencia. Hay urgencia. Hay malestar. Pero la gente debe entender que desde enero se han hecho avances bien importantes ¿Qué aún no han sido suficientes para sacar al oficialismo del poder? Sí, eso es cierto. Las urgencias nublan la racionalidad. Y mientras tanto, Venezuela literalmente muere, se va a apagando y se agotan las opciones para una rápida recuperación. El rescate podría estar cerca, en la medida que la oposición logre crear las condiciones y generar los consensos. No es un asunto de falta de voluntad de Guaidó. Quien piense de esa forma tiene una visión bastante corta del problema y sus raíces. Este muchacho ha hecho un esfuerzo encomiable. Está caminando por el borde de un precipicio y hasta ahora lo ha hecho bien. Aunque algunos amigos se molesten conmigo: es pertinente mantener la esperanza y sostener el espíritu de lucha. Aquí hay algo claro, la situación de la oposición, vista como un todo, es mejor ahora que la que tenían al 1ro de enero de este año.
OPOSICIÓN (I). Quienes tienen como objetivo la caída del régimen siguen haciendo su trabajo con muchas dificultades y carencias. No podía ser distinto en una nación en la que no hay nada y que parece estar siendo castigada por alguna fuerza divina que la odia. Cualquier cosa que usted piense sobre las razones de tanto sufrimiento, serán aceptables en medio de la dramática situación que vive el país. Y en medio de las carencias y problemas es muy normal pensar que no “vamos bien”. Por eso el titular de esta columna tiene que ver con eso ¿#VamosBien? O ¿#NoVamosBien? Hagamos una auditoria de los hechos y al final les daré mi apreciación. Sería una temeridad responder esa pregunta tomando sólo como parámetro la permanencia del oficialismo en el poder. Esa es la meta máxima y por eso es la más importante. Pero si nos tomamos un tiempito en identificar y valorar los hechos ocurridos hasta ahora, podemos tener una visión más amplia y argumentos de fondo para fijar una postura ¿Cuáles son los hechos? El más llamativo es que Maduro sigue en el poder y que la destrucción de Venezuela marcha aceleradamente. Pero hay otros eventos y decisiones que debemos tomar en cuenta. El régimen está cercado porque hoy más que nunca hay una clara conciencia en la mayoría de los países de la comunidad internacional sobre que en Venezuela hay una dictadura, que los poderes públicos no son independientes y que hay una mayoría que pide un cambio urgente. Pero además hay suficiente claridad en cuanto a las cualidades delictivas de quienes tienen secuestrado el poder ¿Eso es un hecho fortuito? ¿O esas naciones llegaron a esas conclusiones por sus propios medios? Ese es el resultado de un sostenido esfuerzo de un sector mayoritario de la oposición que desde hace varios años viene haciendo el trabajo para desvelar al oficialismo en su real dimensión en cuanto a la represión, corrupción y la crisis social y económica que ha producido el rápido empobrecimiento de la mayoría. Hoy el mundo casi en su totalidad tiene una percepción distinta del oficialismo y de lo que ocurre en el país. Eso no cayó del cielo, ni es parte de una epifanía, es el resultado de la labor que han hecho líderes políticos, sociales y hasta económicos. Toda esa visión real de lo que es Maduro, el oficialismo y sus delitos se amplió a partir de enero de este año cuando los acontecimientos tuvieron un ritmo mucho más intenso. Este año hay una serie de sucesos que muy bien pueden servir para la valoración final de si #VamosBien o #NoVamosBien. En los últimos meses se han intensificado las sanciones a personajes claves del oficialismo y a sus testaferros. Aunque poco se ha difundido, se han hecho importantes incautaciones de bienes y dinero no sólo en Estados Unidos, sino también en Europa e incluso Asia. Hay toda una lucha internacional contra las fortunas amasadas gracias al saqueo, que hasta hace un año era impensable. Pero adicionalmente, en estos meses se han recuperado o protegido activos importantes como el oro que está almacenado en el Banco de Inglaterra, pero quizás el paso más importante ha sido la recuperación del control de Citgo, para evitar que el oficialismo la siga usando para obtener dinero y evadir las sanciones internacionales. Esa decisión de Estados Unidos de entregar a Citgo a Juan Guaidó y evitar el acceso oficialista a sus ingresos, fue y sigue siendo un golpe financiero muy fuerte que sufrió el régimen, ya que les impide manejar más de $7 mil millones ¿Es o no es un resultado positivo? Claro que lo es. A eso debemos sumar que la mayoría de los países han reconocido a Juan Guaidó como Presidente interino, pero además han aceptado a sus representantes diplomáticos, lo que amplifica la voz de la oposición ante la comunidad internacional. Que hoy haya embajadores designados por la oposición actuando en nombre de Venezuela, es un logro que debemos tomar en cuenta. Pero si con eso no es suficiente, debemos tomar en cuenta el embargo al petróleo que el oficialismo le envía a Cuba. Esa decisión de Guaidó y las acciones emprendidas por EEUU para evitar que ese regalo llegue a la isla, es un porrazo muy fuerte contra el régimen y su aliado cubano ¿Hay más? Claro que sí. Que una mayoría de naciones llame dictador a Maduro, es bien resaltante porque antes del 10E aún mantenía el privilegio de ser reconocido como Presidente, pero hoy es un usurpador del cargo. Y hay otro punto a favor de una visión menos negativa: el ingreso de la ayuda humanitaria. Ese es un reconocimiento directo y claro del oficialismo sobre el tamaño de la tragedia en cuanto a alimentación y salud. Muchos dirán que no se pudo ingresar esa ayuda cuando Guaidó fijó la fecha, pero lo interesante es que si está ingresando, pero además comenzará muy pronto a llegar a quienes verdaderamente la necesitan. Hasta aquí #VamosBien, aunque no lo bien que quiere la mayoría.
OPOSICIÓN (yII). Está claro que la lucha podría ir mejor de lo que va, pero en la práctica son más las cosas positivas que las negativas. La oposición que lidera Juan Guaidó trata de lograr el objetivo máximo lo antes posible: la caída del régimen y comenzar la recuperación. Y fíjense que hablo de “la oposición que lidera Guaidó” y lo hago porque no toda la oposición se puede incluir en ese grupo. Hay grupos minoritarios que están tratando de afectar la estrategia actual. Algunos lo hacen porque mantienen compromisos con el régimen. Otros porque sencillamente tienen una visión muy personalista y ven a Guaidó como un enemigo para sus planes de ser Presidente o Presidenta de Venezuela. Esa minoría viene haciendo un intenso trabajo en las redes sociales para crear una matriz en la cual acusan a JG de no querer promover el cambio. Lo pintan como si el oficialismo no ha caído, porque Guaidó no quiere tomar las decisiones y emprender las acciones que hagan esa meta posible. Lamentablemente algunos demonios internos están haciendo mucho daño. Inclusive aquellos con vínculos con el oficialismo tratan de frenar cualquier evento que en el marco de la Operación “Libertad” funcione como detonante final ¿Por qué? Porque están tratando de ocupar espacios importantes en un probable gobierno de transición y hasta ahora sólo tienen espacios pequeños. No hay confianza en ellos. Les dan un hueso para mantenerlos medianamente tranquilos, pero aspiran a mucho más. Hasta aquí todo bien, pero es probable que a usted le surja una interrogante ¿Por qué aún Maduro no cae? Y la respuesta es clara y evidente. Los militares aún no están convencidos que ellos se benefician con la caída del régimen. Todo indica que no ha habido una comunicación clara con los generales que sostienen a Maduro, para que ellos sean parte de la transición a cambio de inmunidad ¿Inmunidad? Nadie entrega el poder para que sea ajusticiado, perseguido o encarcelado. Con un pañuelo en la nariz no sólo habría que otorgarles inmunidad temporal por los delitos que han cometido, sino que algunos de esos generales claves deben ser parte de la transición ¿Quiénes? Rápidamente se me vienen dos nombres a la mente: Padrino López y Suárez Chourio. Puede ser que se necesitan otros de estos personajes. Si la oposición se deja llevar por la corriente que propone la aniquilación total del oficialismo y sus cómplices, no van a tener el éxito que están buscando. Repito, con un pañuelo en la nariz deben ofrecer inmunidad y participación en la transición a los militares más importantes, para que ellos vean el beneficio de la caída del oficialismo. Desafortunadamente son un mal necesario. Amigo lector ¿Usted entregaría el poder sabiendo que será aniquilado? Yo no lo haría. Otra de las críticas que con mayor frecuencia se le hace a Guaidó es su lentitud para aplicar el artículo 187, numeral 11, de la Constitución Nacional. Los más críticos aseguran que esa es la panacea absoluta y que JG se niega porque es cómplice del régimen. Esa decisión requiere de la construcción de un consenso internacional, sobre todo porque no hay unidad entre los países involucrados en relación con la viabilidad de una intervención militar ¿Serviría de algo que la AN apruebe la aplicación del 187 si no se produce esa acción militar posteriormente? Sería una decisión perdida y aislada. Para asumir ese paso, primero hay que asegurar la respuesta correcta de quienes tienen que poner hombres, armas y dinero para ingresar y sacar al oficialismo ¿Eso está listo? No y por eso deben seguir construyendo las condiciones ¿Entienden el retraso en aplicar ese artículo? Luego de todas estas explicaciones ante las preguntas iniciales ¿#VamosBien? O ¿#NoVamosBien? Mi apreciación es que aún #VamosBien, aunque pudiéramos ir mejor.
OFICIALISMO. Tal como lo revelamos en VyR, el oficialismo decidió el camino de la radicalización luego que las negociaciones con Estados Unidos fracasaron, porque los gringos se negaron a aceptar una de las condiciones que impuso el régimen y que buscaba la anulación de todos los delitos de lesa humanidad que ellos han cometido. A partir de esa negativa, decidieron atrincherarse en el poder y resistir sin importar el costo. Desde ahí incrementaron el uso de bandas de paramilitares en la represión de la ciudadanía. Desde ahí aumentaron la detención de opositores. Desde ahí decidieron impedir con todos los medios que tienen disponibles la Operación “Libertad” y sobre todo obstaculizar una marcha que llegue hasta Miraflores. El uso de los paramilitares disfrazados de colectivos de paz, les permite acusar a la oposición de usar la violencia de ultraderecha y además evitar alguna reacción contraria de policías y militares. Por eso con mucha seguridad esos colectivos serán la primera línea de defensa de Miraflores, en el supuesto caso que se decida marchar hacia ese palacio que representa el epicentro del poder en Venezuela. Contra la intención de sostenerse en el poder actúa el rápido deterioro nacional. La crisis eléctrica se suma a la falta de agua, la inseguridad y la escasez de alimentos y medicinas. Es de tal magnitud la tragedia que tuvieron que aceptar el ingreso de la ayuda humanitaria, bajo el control de la Cruz Roja Internacional. Otro de los obstáculos es que poco a poco se van quedando sin acceso a dinero fresco. Nadie les quiere prestar bajo las actuales condiciones. Nadie les da crédito en medio de la enorme incertidumbre. Y sin dinero es difícil que puedan seguir con el control, porque la inestabilidad social se los impediría. Lo que si les puede resultar es que convenzan a Rusia de aumentar la presencia militar en Venezuela. Tal como analizamos en VyR esta semana (LEA: http://verdadesyrumores.com/conflicto-hasta-donde-puede-llegar-la-presencia-militar-rusa-en-venezuela/) hasta ahora los militares rusos están atendiendo los negocios de su gobierno, pero eso podría cambiar si el oficialismo logra convencerlos de la utilidad que para sus objetivos tiene que Rusia instale bases militares en Venezuela. Eso sería demasiado peligroso porque nos colocaría en el centro de un conflicto entre dos potencias nucleares. Podemos inferir que el ofrecimiento ya fue hecho y que los rusos analizan los pros y los contras. Para las ambiciones de Putin no sería malo que logren expandir la influencia militar en América Latina, pero también debe considerar el gasto que eso significaría y la utilidad que tendría. Inclusive, el régimen debe haber hecho la misma oferta a China, pero esa nación ha sido mucho más cautelosa que Rusia en cuanto al conflicto venezolano.
MILITARES. La Fuerza Armada Nacional sigue en el centro de la tormenta. Sostener al oficialismo tiene un alto costo, pero entregarlos sin un acuerdo que les otorgue inmunidad también tiene un alto costo. Ellos necesitan garantías para asegurarse que no serán perseguidos y encarcelados, por lo menos por ahora. Partiendo de lo que ha sido hasta ahora su conducta, no les han dado las garantías que están buscando. Sea cual sea la decisión que tomen, tendrá consecuencias muy fuertes para Venezuela. Si dejan que el oficialismo siga en el poder, al final serán cómplices de la destrucción del país. Pero si no impiden una salida violenta, también serán co responsables. No es fácil la postura militar. Hay división interna, pero además mucha persecución hacia sus integrantes.
COMUNIDAD INTERNACIONAL. Varias naciones se juegan mucho en el desenlace de la crisis venezolana. Un fracaso tendría costos políticos muy elevados para Donald Trump, Iván Duque y Jair Bolsonaro. Trump está muy cerca de las elecciones en las cuales aspira la reelección y fracasar en la resolución de la crisis venezolana, sería un peso muy fuerte para para su intención. Le criticarían haber sido derrotado por un grupo delictivo que controla a un país caribeño. Quedaría en ridículo después de todo lo que él y sus voceros han dicho. Duque vería como sus enemigos de la izquierda toman fuerza en Colombia. Y Bolsonaro agregaría otro punto conflictivo a su gestión que está en crisis en apenas 100 días. Por eso no es posible descartar que Trump escoja la opción militar de liberar a Venezuela, lo que le generaría beneficios electorales en los votantes latinos.
ARDE LA CASITA (I). Las cosas en el partido Un Nuevo Tiempo siguen de mal en peor. El estilo sectario de Manuel Rosales sigue generando la separación de muchos dirigentes. No consulta a nadie, no escucha a nadie, no permite que nadie distinto a sus pupilos crezca como líder. Sólo él decide y eso sigue alimentando un pésimo ambiente. Cada vez son menos los que asisten a la tradicional reunión de los lunes del Comité Político en el Zulia. Pero quizás lo que más desagrado ha causado es la forma como Rosales aborda la actual crisis. Se oculta y calla ante el desastre nacional. Hay un claro compromiso con el oficialismo. Ya eso es inocultable ¿Las evidencias? Sus pocas apariciones públicas haciendo verdadera oposición a un régimen que destruyó a Venezuela. Sus largos y notorios silencios demuestran que tiene facturas que pagar. Ante tanta pasividad, la dirigencia de UNT considera que deben liderar la lucha contra Maduro en el Zulia y no hay directrices en ese sentido. Le dejaron esa posición principalmente a Primero Justicia y Voluntad Popular. Mientras el país está a punto de colapsar, Rosales sale en caminata por los barrios como si estuviera en campaña. No está haciendo mucho, por no decir nada, a favor de alcanzar una transición. Eso está causando serias fricciones en UNT porque no estan siendo protagonistas del cambio que se está gestando. Muchos han optado por distanciarse sin hacer pública su renuncia, porque consideran que no es el momento de pensar en el clima interno de los partidos, sino en el país. Tienen claridad que si no salen del oficialismo, no habrá oposición, ni partidos, porque todo se encaminará a un régimen comunista al estilo cubano. La mayoría lo ve así, menos Manuel Rosales quien se quedó atorado en el túnel del tiempo.
PEP. El gobierno de los Estados Unidos está tomando decisiones muy fuertes contra políticos, militares y jueces venezolanos. Les están cerrando sus cuentas en los bancos de ese país, como parte de una ofensiva contra las “Personas Expuestas Políticamente” (PEP) ¿Qué implica esa categoría de clientes para el sistema financiero? Definamos a un PEP: “El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) define a una Persona Expuesta Políticamente (PEP) como aquella que es o ha sido encomendada a una función pública prominente”. Esa es una definición de aplicación casi que universal en el sistema financiero y busca evitar que los clientes que entran en esa denominación puedan usar los bancos para lavar dinero proveniente de actividades ilícitas. Entendido el punto paso a los detalles de lo que están haciendo las autoridades federales. Están cerrando una gran cantidad de cuentas de PEP tanto oficialistas, como opositores. Son muchos los preocupados, porque se estan quedando sin opciones de usar el sistema financiero de EEUU. No están discriminando entre quienes son del oficialismo y los opositores, sino que si está calificado como PEP, les cierran las cuentas y con pocas opciones para defenderse. Lo lamentable es que en medio de esa operación están limitando aún la apertura de cuentas para venezolanos, sin importar que nada tengan que ver con la corrupción en nuestro país.
GUISO. Me escribe un amigo que forma parte del entorno de Omar Prieto para alertarme que viene un barco desde China con cuatro contenedores repletos de plantas eléctricas y que la compra es del propio Prieto. El patriota cooperante no supo explicarme si es una adquisición de la Gobernación del Zulia o un negocio particular de Prieto. Pero conociendo al personaje es imposible creer que se trata de un negocio sano. Huele a guiso. Algunos creen que Prieto las compró a través de alguno de sus empresarios aliados, quien luego se las venderá con un sobreprecio astronómico a la Gobernación y así hacen un negocio redondo gracias a la crisis eléctrica. Con este señor no se puede esperar nada bueno. Le recomiendo al general Néstor Reverol, quien por cierto le tiene muy poco afecto a Prieto, que averigüe este guiso. Quizás le agradaría decomisar la carga de plantas eléctricas, en medio de la emergencia que existe en el país. Sería interesante si el propio general le cae en cayapa al barco y se quede con la carga.
ARDE LA CASITA (yII). Una muestra de las fuertes diferencias internas en Un Nuevo Tiempo, es que hace unos días dos de las diputadas ante la Asamblea Nacional tuvieron una muy fea discusión en la reunión del Comité Político. Todo comenzó cuando Elimar Díaz hizo señalamientos sobre la necesidad que UNT fuese más activo en medio de la crisis actual, a lo que respondió Nora Bracho lanzando fuertes descalificaciones. Todo llegó a un punto tal, que Nora Bracho le espetó a Elimar que ella estaba envidiosa del liderazgo nacional que ella había construido, a lo que la diputada Díaz respondió exigiendo respeto ¿Cuál es el trasfondo de la discusión? Que Nora Bracho trata de eliminar a todo adversario en su afán de ser candidata a la Alcaldía de Maracaibo. Parece que la diputada Bracho no entiende que si no sacan al oficialismo del poder no habrá elecciones, ni oposición que participe o vote en esos comicios. Lo peor es que la aspiración electoral de Nora Bracho es aupada por Manuel Rosales, ya que ella es parte del grupito de preferidos de MR ¿Están o no están desfasados con la realidad nacional?
HISTORIA DE UN ENCHUFADO… de la Gobernación del Zulia. Uno de los más privilegiados miembros de la gestión de Omar Prieto vive en una lujosa villa de la zona norte de Maracaibo. No se destaca por su inteligencia, pero si por la habilidad para hacer negocios turbios al lado de Prieto. Me dicen que tiene o tenía una licorería en la calle Cecilio Acosta con nombre de cacique indígena. Su casa es una de las más amplias y costosas, porque le ha invertido mucho dinero. Incluso supera a otros enchufados que viven en la urbanización. Es el más odiado de la comunidad. Con su sueldo no puede justificar la inversión que ha hecho y los lujos con los que viven él y su familia ¿Quién es el personaje? La semana que viene revelaremos su nombre.
PCD. La dirigencia del Partido Centro Democrático (PCD-Zulia) sigue haciendo un bueno trabajo como parte de la oposición en el estado. Están recibiendo responsabilidades importantes dentro de la estrategia opositora y están entregando buenos resultados. Como su presidente, Carlos Alaimo, está siendo perseguido por Omar Prieto bajo acusaciones de financiamiento al terrorismo e incitación al odio; en el PCD el trabajo sigue sin detenerse de la mano de mi amigo Marco Rivero, entre otros dirigentes.
AL CIERRE. Me informan que fue juramentado el nuevo Contralor del estado Zulia. El escogido es Jeffry Ramón Leal Jiménez, quien juro ante el Contralor General de la República designado ilegalmente por la ANC, Elvis Amoroso ¿Adivinen que cargo ocupó el señor Leal? Pues fue nada más y nada menos que el de Contralor del municipio San Francisco durante la gestión de Omar Prieto, lo que significa que este señor viene a avalar la “pulcritud” y “transparencia” de los guisos del Gobernador. Pero no todo será firmar y maquillar los entuertos de la gestión de Prieto, pues viene con una misión especial: investigar a fondo la administración de Pancho y buscar los elementos que permitan señalarlo ante el PSUV en Caracas y terminar de hundir al nuevo embajador en México. A pesar que FAC sale del Zulia, la guerra con OP no cesa.