El Banco Central de Venezuela (BCV) permite a partir de esta semana a instituciones financieras locales mantener mesas de cambio donde el sector privado pueda comprar y vender divisas con más libertad, pese a que seguirá vigente un control cambiario que funciona desde hace casi dos décadas, según una resolución del emisor.
El nuevo esquema que difundió el BCV en su sitio web el martes y presentaron a banqueros en los últimos días es otro intento del gobierno de Nicolás Maduro para flexibilizar un régimen cambiario que desde hace meses enfrenta problemas por la baja oferta de divisas y sanciones financieras impuestas por Estados Unidos, dijeron dos fuentes del sector financiero.
Según la resolución del BCV, las instituciones estarán habilitadas para efectuar “operaciones de compra y venta en moneda extranjera por parte de personas naturales y jurídicas”.
El BCV reduce en este esquema su participación en el sistema cambiario, pero el texto advierte que el mecanismo operará en el marco del control vigente y la tasa oficial la informará a diario el emisor, tras recibir información de cada banco sobre sus operaciones de cambio.
Los bancos continuarán enfrentando la baja oferta de dólares, dijeron las fuentes, porque podrán transar solo una porción de los dólares de los exportadores y las remesas que envían quienes están fuera del país.
En el mecanismo oficial que operaba hasta ahora, Dicom, se vendieron a lo largo del año unos 32 millones de dólares proveniente de esa misma oferta, según datos del BCV.
Bajo el régimen de Nicolás Maduro, el BCV dejó de inyectar divisas oficiales en el Dicom, tras una caída de los ingresos petroleros por la menor producción de crudo y el impacto de sanciones del gobierno de Donald Trump.
Por sanciones
En la última semana, el BCV dejó incluso de convocar a la venta de divisas oficiales en el Dicom, una vez que Estados Unidos impuso al emisor sanciones financieras en abril.
Los bancos locales han enfrentado cada vez más problemas para movilizar fondos al exterior, por la cautela que asume la banca global al servir de intermediarios en operaciones que involucran dinero administrado por entes del régimen venezolano bajo el esquema de sanciones contra Maduro que comenzó en 2017.
En paralelo, el Banco Central desde febrero empezó a obligar a las instituciones a vender millones de euros en efectivo a empresas y particulares buscando alternativas ante las limitaciones de los entes estatales para adquirir insumos en el exterior.
Las fuentes financieras dijeron que tomaría algunos días el inicio de las transacciones cambiarias en los bancos, mientras se aclaran dudas sobre su operatividad.
Con información Reuters