El miedo entre los ciudadanos peruanos por el extenso terremoto de la madrugada del domingo fue generalizado, particularmente en las regiones y ciudades más próximas al epicentro como Yurimaguas, San Martín, Amazonas y Loreto, donde la población salió a la calle y allí permanecía por miedo a que se produzcan réplicas. Así lo reseña infobae.com
Una particular escena se vivió en una comisaría de Loreto. Ante la larga duración del sismo, se ordenó la evacuación de todo el personal presente, incluidos los detenidos de la carceleta. Según el diario La República, ocurrió en la sede policial de Moronacocha, en la provincia de Maynas.
“Agarre cada uno a un detenido”, ordenó una de las autoridades, no identificada, ante el temor de que se den a la fuga. Posteriormente, y con un creciente nerviosismo, repitió: “¡Agarre cada uno a un detenido, carajo!”.
El alcalde de Yurimaguas, Hugo Araujo, informó que se ha reportado el colapso de varias viviendas antiguas. “Hay muchas casas antiguas que han quedado colapsadas (construidas de adobe) por este sismo fuerte”, detalló Araujo.
A su vez, el alcalde de Lagunas, Arri Pezo, dijo que la población no quiere ingresar a sus casas por temor a nuevas réplicas del fuerte sismo.
“No se podía caminar a la hora del sismo, las cosas caían. No podemos verificar si tenemos daños porque no hay energía eléctrica”, dijo Pezo a la radio RPP.