Florida y sus votantes hispanos centran de nuevo la campaña electoral 2020 en Estados Unidos con el lanzamiento este martes de “Latinos por Trump” en Miami, seguido del primer debate de los aspirantes a la candidatura demócrata en las presidenciales.
Por la llamada “ciudad mágica” van a pasar Mike Pence, vicepresidente del Gobierno de Donald Trump, quien busca la reelección; así como el exvicepresidente, Joe Biden, y otros 19 aspirantes demócratas, a los que Biden aventaja en todos los sondeos.
Desde la semana pasada ambos partidos se han lanzado a conquistar el voto de los más de 13 millones de votantes de Florida, entre ellos unos dos millones de hispanos, para hacerse con los 29 votos que le corresponden al “estado del sol” en el Colegio Electoral, el órgano que define al ganador de las presidenciales.
“Los 29 votos electorales siempre, casi siempre deciden la elección en el país, y es de suma importancia para los republicanos ganar Florida”, aseguró a Efe este lunes Frank Mora, director del Instituto de Latinoamérica y el Caribe de la Universidad Internacional de Florida (FIU).
El mandatario estadounidense, Donald Trump, que arrancó oficialmente su campaña para la reelección el martes pasado en Orlando (centro de Florida), tiene en Pence un portavoz de sus políticas de mano dura hacia Cuba, Venezuela y Nicaragua con visitas frecuentes a Miami.
Este martes Trump lanzará la nueva coalición “Latinos con Trump” en esta ciudad del sur de Florida.
Biden, por su parte, sacó este lunes la cara por Latinoamérica en una columna en el diario El Nuevo Herald en la que crítica el “desastre” de la Administración Trump en la región, el “racismo” del presidente en el tema migratorio y hace un llamado para que el Congreso haga “ya” ciudadanos a los soñadores.
En un estado con un 20 % de inmigrantes y conocido como la “Puerta de Latinoamérica” se prevé que el debate demócrata, dividido entre el miércoles y el jueves por la cantidad de candidatos, esté centrado en la inmigración, la política regional y el cambio climático.
Ocho de los veinte candidatos que calificaron para el debate que presentará la cadena NBC, entre ellos los senadores Bernie Sanders y Elizabeth Warren, el segundo y la tercera en los sondeos, participaron el viernes pasado en un foro de Telemundo centrado en la crisis humanitaria migratoria y la posible inclusión de una pregunta “racista” sobre ciudadanía en el Censo 2020.
Julián Castro, secretario de Vivienda en el Gobierno de Barack Obama (2009-2017) y el único hispano de los aspirantes demócratas, dijo en Miami que Trump crea un “circo” de supuestas crisis, como las anunciadas redadas para este fin de semana, y después retrocede para quedar como un “héroe”.
Mora dijo que el trabajo de los demócratas en esta campaña no es solo resaltar lo negativo de Trump sino “explicar la agenda positiva en cuanto a salud, inmigración, etcétera”.
Esteban Garcés, directivo nacional de Mi Familia Vota (MFV), aplaudió que los demócratas hayan despertado con los latinos en esta campaña hacia la Casa Blanca en 2020 en Florida, un estado que le puede dar la Presidencia a cualquiera de los dos partidos.
Garcés dijo a Efe que a diferencia de la campaña de 2016, en la que perdió Hillary Clinton, los “demócratas están atrayendo el talento hispano que tenemos de nuestra comunidades para trabajar en las campañas. Y es temprano, es junio de 2019”.
En el lado republicano, Jeanette Núñez, la primera mujer latina vicegobernadora de Florida, ensalzó este domingo las políticas de Trump con los latinos del país, en una extensa columna en el Miami Herald en la que no mencionó la inmigración.
La cubano-estadounidense elogió el “menor índice histórico de desempleo” de esta comunidad, “del 4,2 %”, superior sin embargo al del resto de la población, que dijo es de “3,3 %”.
Sin embargo, Mayra Macias, vicepresidenta de Latino Victory, dijo hoy que las recientes encuestas de Univision y Telemundo “demuestran que los latinos en Florida están contra Trump y rechazan el odio”.
Florida ha acogido a una gran población de asilados de Cuba, Venezuela y Nicaragua, que aplaude la mano dura de la Administración Trump, que se refiere a esos países como la “troika de la tiranía”.
Sin embargo, Mora señaló que es una “incongruencia de Trump” porque “está deportando venezolanos, deportando cubanos”. Precisó que hay “37.000 cubanos con orden de deportación según datos de ICE (…) que tienen casas, que tienen familias”.
Trump y su aliado, el gobernador Ron DeSantis, que firmó este mes una ley considerada “inconstitucional” y la más “severa” contra las “ciudades santuario”, enfrentan en el estado el repudio de grupos a favor de los inmigrantes y congresistas.
“Nunca se había visto anuncios de ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de redadas masivas en Florida”, se lamentó hoy Melissa Taveras, portavoz de la Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC) durante una conferencia de prensa convocada por el Partido Demócrata.
Debbie Mucarsel-Powell, la primera congresista de EE.UU. nacida en Ecuador, hizo este lunes un llamado al rechazo a “las crueles política migratorias y la defensa de los valores estadounidenses”.
El sur de Miami es además sede del mayor centro de detención de menores, el de Homestead, con capacidad para 3.200, entre ellos algunos separados de sus padres y otros llegados sin acompañantes adultos.
La senadora Warren, quien estará en el debate este miércoles, cuestionó en el foro de Telemundo las compañías que se lucran del drama de los niños inmigrantes en estos centros.
Los otros participantes del debate serán los senadores Kamala Harris, Kirsten Gillibrand, Amy Klobuchar, Michael Bennet y Cory Booker, y los representantes Eric Swalwell, Tulsi Gabbard y Tim Ryan.
También están los excongresistas Beto O’Rourke y John Delaney, el gobernador de Washington, Jay Inslee, el exgobernador de Colorado John Hickenlooper, los alcaldes Bill de Blasio, Pete Buttigieg, la autora Marianne Williamson y el exejecutivo de tecnología Andrew Yang.
EFE.