Parece un chiste. O quieren provocar. Pero lo cierto es que el Movimiento de los Países No Alineados votó en Caracas y respaldó al régimen de Maduro para que presente la candidatura de Venezuela al Consejo de Derechos Humanos de la ONU este próximo octubre.
Por: Juan Carlos Zapata
¿Es un chiste? ¿Por qué lo hacen? Sabe el Movimiento que el de Nicolás Maduro es un régimen “sancionado” y que sigue monitoreado por la propia ONU, por la oficina de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU, que dirige la expresidenta de Chile, Michelle Bachelet. Esta produjo lo que ahora se conoce como el Informe Bachelet, que dejó al descubierto la crueldad del régimen, y todas las variantes de violación de los derechos humanos. El Informe ha golpeado al régimen, cuyos voceros, el propio Maduro, no han podido soslayar. Los ojos de los defensores de los derechos humanos en el mundo están puestos sobre Maduro. Y Maduro lo sabe. Por lo de la candidatura al Consejo de la ONU se asoma como todo un contrasentido. O un chiste de mal gusto. O lo que es usual en las dictaduras: un reto a la comunidad internacional.
¿Es un chiste? Porque la decisión del Movimiento no aparece en la Declaración de Caracas. Pero lo anunciaron tanto el embajador de Maduro ante la ONU, Samuel Moncada, como el canciller de Maduro, Jorge Arreaza. ¿Es un chiste? O son expresiones que intentan ser más bien propaganda. Para sorprender a incautos. Para sorprender a los seguidores de Maduro. Para que las lean y las oigan los delegados del Foro de Sao Paulo que comienza hoy en Caracas. Para que Granma cuelgue un titular destacado. Los asistentes al Foro de Sao Paulo dirán: Allí sigue Maduro, respaldado por 120 países. Allí sigue Maduro respetando los derechos humanos, tanto que Venezuela puede ser candidata a una silla en el Consejo de la ONU. Candidata sí. ¿La aceptarán?
Allí está el punto. Porque el Informe va a la Corte Penal Internacional por iniciativa del Grupo de Lima. Va a la Corte Penal Internacional por iniciativa de la Asamblea Nacional y Juan Guaidó. El Informe lo llevará Estados Unidos al Consejo de Seguridad como un argumento de peso cuando le corresponda discutir el caso Maduro y Venezuela con Rusia y China. El Informe será objeto de debate en ONU en septiembre, en octubre, en el próximo periodo de sesiones. El Informe será objeto de análisis en oficinas, en los pasillos, entre las delegaciones de la ONU. El Informe es tomado en cuenta en la mesa de negociación que los equipos de Maduro y Guaidó sostienen de manera continua con mediación del gobierno de Noruega. El Informe, reza la declaración del Grupo de Lima de este martes, debe ser monitoreado en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde Maduro quiere sentar a un representante. Y es el propio Grupo de Lima el que insta que el Informe sea discutido en el Consejo de Seguridad.
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