La petrolera brasileña Petrobras anunció este viernes que en los próximos meses reducirá sus importaciones de gas natural boliviano pese a que considera que el combustible del país andino aún es imprescindible para Brasil.
“Estamos negociando un nuevo contrato con Bolivia para reducir las importaciones”, aseguró el presidente de la mayor empresa de Brasil, Roberto Castello Branco, en una rueda de prensa en Río de Janeiro.
“Pero aún es prematuro decir que podemos prescindir del gas boliviano, incluso porque tenemos producción propia en Bolivia. Vamos a reducir las compras en Bolivia pero no podemos prescindir de ese combustible”, agregó el presidente de la estatal.
El ejecutivo explicó que, como parte del acuerdo que suscribió con el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE, órgano antimonopolio de Brasil) para reducir a la mitad su participación en el sector de gas en el país, Petrobras se comprometió a vender su participación en el propio gasoducto Bolivia-Brasil y a reducir sus importaciones para que otras empresas puedan usar el ducto.
“Nuestro acuerdo con el CADE nos obliga a abrir espacio para que otras empresas importen de Bolivia”, afirmó.
Castello Branco aseguró que en el segundo trimestre de este año Petrobras importó menos gas natural boliviano debido a que, por sus menores precios en el mercado, era más rentable importar GNL (Gas Natural Licuado) para abastecer a sus clientes.
En la misma rueda de prensa la directora de Refino y Gas de Petrobras, Anelise Lara, explicó que, por ser un combustible tan difícil de almacenar, Petrobras necesita mantener todas las alternativas disponibles para abastecerse de gas, incluso el gasoducto Bolivia-Brasil, y poder usar la que sea más conveniente en el momento por sus precios.
“Por eso lo importante es que podamos tener todas las alternativas disponibles, tanto la producción nacional de gas, como la producción boliviana como las importaciones de GNL, para que optemos mas por una o por otra dependiendo del precio”, afirmó.
La directora afirmó que, por lo menos en los últimos meses, la alternativa más rentable es la importación de GNL debido a que su precio es inferior al gas importando de Bolivia.
La petrolera boliviana YPFB anunció el mes pasado que está interesada en adquirir la participación del 51 % que Petrobras posee del gasoducto Bolivia-Brasil para poder negociar directamente sus ventas de gas a diferentes distribuidores y empresas brasileñas.
De acuerdo con el gerente de Regulación de Gas Transboliviano (GTB),Luis Alberto Poma Calle, en caso de que asuma el control del gasoducto, la YPFB tendrá más capacidad para negociar directamente, sin la intermediación de Petrobras, la venta de su gas a las grandes industrias privadas del sureste de Brasil.
EFE.