Una niña de 6 años fue esposada y enviada a un centro de detención juvenil después de sufrir una pataleta y golpear a un empleado de una escuela primaria de Florida, informan este lunes medios estadounidenses.
El suceso ocurrió el pasado jueves, cuando Kaia Rolle, alumna de primero en la escuela Lucious and Emma Nixon Elementary en Orlando (Florida), comenzó a portarse mal en el aula.
Fue entonces que su maestra la envió a las oficinas de la escuela, donde sufrió un pataleta y, cuando un empleado intentó tranquilizarla agarrándola de las muñecas, la niña le golpeó.
Dennis Turner, agente escolar del centro educativo, decidió esposar a la niña y la trasladó al Centro de Evaluación de Menores en Orlando por agresión.
En este cetro le tomaron las huellas dactilares y le hicieron las tradicionales fotografías policiales a la pequeña, para incredulidad de su abuela Meralyn Kirkland, según le contó al canal local WKMG.
Kirkland excusó el comportamiento de su nieta, que fue liberada y se encuentra en casa con la familia, al asegurar que tiene falta de horas de sueño como consecuencia de una apnea del sueño.
“Ella tiene una condición médica que estamos trabajando para resolver”, dijo Kirkland al agente Turner cuando pudo hablar con él. “Entonces él me dice:” Bueno, yo tengo apnea del sueño y no me comporto así”.
La indignada abuela no termina de creerse por lo que tuvo que pasar su nieta. “¿Cómo le haces eso a un niño de 6 años y solo porque ella pateó a alguien?”, se preguntó.
La Policía de Orlando ha informado de que está investigando la actuación de Turner, que detuvo ese mismo día a otro menor, en este caso de 8 años, que fue puesto en libertad después de ser procesado en el centro de detención juvenil.
Según la agencia local del orden, antes de que uno de sus oficiales detenga a un menor de 12 años debe recibir aprobación por parte de un supervisor, cosa que Turner nunca hizo.
EFE