El presidente de Argentina, Mauricio Macri, dijo este martes ante la Asamblea General de la ONU que la “dictadura” de Nicolás Maduro sumió a Venezuela en una crisis humanitaria “sin precedentes” y pidió a la comunidad internacional usar la diplomacia para lograr que la democracia regrese a ese país.
En su intervención, el jefe de Estado argentino recordó que desde el inicio de su mandato, a finales de 2015, ha liderado “la denuncia de la gravísima situación de violación de los derechos humanos en Venezuela”.
“La dictadura de Nicolás Maduro ha sumido a Venezuela en una crisis humanitaria sin precedentes”, aseveró Macri.
El presidente argentino advirtió que “el éxodo masivo de millones de venezolanos está afectando gravemente la estabilidad y la gobernanza” de la región suramericana.
“Quiero una vez más convocar a la comunidad internacional para utilizar todas las herramientas diplomáticas y jurídicas disponibles para revertir esta situación, para que Venezuela vuelva a ser libre y democrática”, señalo.
En otro tramo de su discurso, Macri dijo que Argentina mantiene la “herida abierta” de la “impunidad” de los atentados de 1992 contra la embajada de Israel en Buenos Aires y de 1994 contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA).
La comunidad judía local atribuye a Irán y a Hizbulá la planificación y ejecución de ambos atentados.
Macri dijo que Argentina quiere que “todas las personas involucradas en los ataques se presenten ante tribunales argentinos para que puedan ser juzgados y eventualmente condenados”.
“Por eso, a 25 años del ataque terrorista más brutal en nuestro territorio, instamos nuevamente a la República Islámica de Irán a que coopere con las autoridades judiciales argentinas para avanzar en la investigación del atentando contra la AMIA”, sostuvo Macri.
En este marco, el presidente argentino pidió “cooperación a los países amigos para evitar que los imputados sean recibidos o amparados por inmunidad diplomática”.
Por otra parte, el jefe de Estado argentino recordó que su país reafirma “los legítimos e imprescriptibles derechos de soberanía sobre las islas Malvinas”, archipiélago bajo dominación británica y por el que Argentina y el Reino Unido se enfrentaron en una guerra en 1982.
Macri aseguró que Argentina “mantiene su predisposición y el llamado al Reino Unido a reanudar negociaciones bilaterales que nos permutan encontrar una solución pacífica y definitiva a la disputa”.
El mandatario, que en octubre próximo buscará su reelección, reivindicó su política de reinserción de Argentina en la comunidad internacional y destacó el acuerdo de libre comercio firmado este año por la Unión Europea y el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) tras veinte años de negociaciones.
Por último, el presidente hizo mención a la difícil situación económica que atraviesa Argentina, en recesión desde abril de 2018, con altos índices de inflación y sometida a severas turbulencias financieras desde agosto pasado.
“En esta situación de incertidumbre que estamos atravesando los argentinos, hoy mi prioridad absoluta es ocuparme de todos ellos y llevarles alivio para transitar este momento”, aseguró. EFE