Hong Kong va a prohibir portar máscaras en las manifestaciones

Hong Kong va a prohibir portar máscaras en las manifestaciones

Puede haberse convertido en un meme de internet de extrema derecha en Occidente, pero la imagen de Pepe the Frog está siendo rehabilitada en Hong Kong, donde los manifestantes por la democracia lo han acogido como un símbolo irreverente de su resistencia. (Foto por Mohd RASFAN / AFP)

 

El ejecutivo de Hong Kong va a prohibir próximamente que se lleven máscaras en las manifestaciones, al cabo de cuatro meses de una inédita crisis política en la excolonia británica, indica el jueves la prensa local.

Ni el gobierno central chino ni el ejecutivo local, alineado con Pekín, han logrado poner fin a cuatro meses de enfrentamientos entre militantes prodemocracia y fuerzas de seguridad, a veces de extrema violencia.





La movilización empezó contra un proyecto de ley sobre la extradición a China, ya retirado, y se amplió después a demandas de mayor democracia y contra la injerencia de Pekín en los asuntos locales.

Una manifestación estudiantil en el campus de la Universidad China de Hong Kong (CUHK) en solidaridad con el estudiante que fue disparado por un oficial de policía el 1 de octubre, y los estudiantes de la CUHK que fueron arrestados en protestas antigubernamentales en Sha Tin, Hong Kong, China, el 3 de octubre de 2019. REUTERS/Susana Vera

 

Para no ser identificados y evitar acciones judiciales, los manifestantes llevan máscaras, además de cascos o anteojos especiales para protegerse de los gases lacrimógenos.

Según el South China Morning Post, el ejecutivo local espera disuadir a los manifestantes al invocar una ley de urgencia que data de la época colonial y que no requiere un voto del legislativo local.

Las informaciones de prensa sobre una posible prohibición de portar máscaras fue celebrada por la bolsa de Hong Kong que cerró este jueves en alza de 0,3%.

AFP

 

La policía antidisturbios es vista durante una protesta en el distrito de Sham Shui Po, en el Día Nacional de China en Hong Kong, China, el 1 de octubre de 2019. REUTERS / Athit Perawongmetha