Luis Velázquez Alvaray: Costa Rica da la cara por los Derechos Humanos

Luis Velázquez Alvaray: Costa Rica da la cara por los Derechos Humanos

El Presidente Carlos Alvarado, reafirmando los postulados de un país Democrático, ha respondido al llamado del mundo, que observa con estupor como la tiranía Venezolana, pretende ser miembro del Consejo de Derechos Humanos, del mismo organismo que les ha investigado y comprobado su sistemática violación a los más elementales derechos de 30 millones de personas.

En un acto que le engrandece,- Costa Rica propone asumir esta responsabilidad para evitar esta tragedia mundial-, ya que de no hacerlo, el Castrochavismo automáticamente usurparía también esa representación. El Presidente Alvarado señaló que: “por las graves violaciones contra los DDHH que evidenció el informe de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, el régimen de Venezuela no es candidato adecuado para el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Costa Rica se propone como alternativa.”

La organización civil Human Rights Watch, representada por su director, José Miguel Vivanco, planteó la situación dramática que se viviría si los tiranos concretaran semejante intención. Tamara Suju, quien se ha encargado de llevar a la Corte Penal Internacional los crímenes de esta banda, que se destaca por haber cometido todos los delitos en contra no solo de Venezuela, sino de los países de América latina, víctimas de esta empresa criminal, que pretende desestabilizar los países del continente, para afianzar sus dominios bandidescos. Ha señalado que: “sería una vergüenza que una tiranía acusada ante la CPI por crímenes de lesa humanidad, y denunciado por la OEA y por la ONU, se sentara en esa silla”.





Un país donde imperan las ejecuciones extrajudiciales, con 5 millones de refugiados, con casi un millón de niños que están sin sus padres porque estos han tenido que abandonar el país. Con los indígenas perseguidos y despojados de sus territorios. Presos políticos torturados y encarcelados, violentando el debido proceso. En fin, un país destruido por bandas criminales y que es el peor violador de seres humanos en el hemisferio, que pretenda integrar este organismo es el mundo al revés; tiranos “protegiendo los derechos humanos”.

El paso dado por Costa Rica debe ser valorado íntegramente, ya que la omisión de este hecho, “ácido y cínico”, es de graves consecuencias para la libertad mundial. Es paradójico, pero de estos criminales que “caminan por América Latina”, se puede esperar cualquier impudicia. La Venezolana es una tiranía que solo protege sus intereses criminales. El descoco y el cinismo son las banderas que conocen.

La ruleta del comunismo no es solo rusa. Es un abanico de baja estofa, donde se reúnen facinerosos de todos los calibres, más poderosos que los carteles criminales que han existido hasta el presente. Es el malandraje político que invade países, para lucrarse de sus riquezas y apuntalar la industria de la perversidad humana.

Después del paso dado por Costa Rica, – corresponde a los demócratas del mundo apoyarle-, y el Presidente Guaidó debe ser el primero en activar su estructura diplomática, para derrotar las intenciones malignas de estos déspotas del siglo 21, que están dispuestos a asaltar las instituciones para ponerlas al servicio del mal. El 18 de octubre hay que demostrarle a la tiranía que están descubiertos, y que el puesto que les corresponde es el de reos por delitos de lesa humanidad. La justicia que desconocen les llegará tarde o temprano, pero les llegará.