Algunas de las rivalidades más cruentas entre cárteles de la droga tienen como origen relaciones amorosas fallidas por las cuales algunos narcotraficantes han matado o han muerto y otros han iniciado guerras que duran años.
Un romance que desató una de las guerras entre cárteles más sangrientas en México fue la de Armando López ‘El Rayo de Sinaloa’, compadre de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, quien pretendía a Enedina Arellano, hermana de los integrantes del cártel de los Arellano Félix, en Tijuana. “El Rayo de Sinaloa”, operaba en la década de los 80 en la zona desértica de Sonora, donde bajaba avionetas con cocaína.
En 1989, cuando El Rayo se presentó en Tijuana para hablar con Ramón Arellano Félix por órdenes de Guzmán Loera. Llegó acompañado de una mujer, que no era Enedina, y ambos, ya entrados en copas, llegaron al famoso Club Britania para buscar a su hermano, Benjamín Arellano, que festejaba el bautizo de su hija.
Como no traían invitación fueron detenidos en la entrada, se enfrentaron con los guardias de seguridad, al escuchar la pelea, Ramón Arellano salió a ver qué pasaba y al enterarse que era “El Rayo de Sinaloa”, le disparó en la cabeza con una pistola escuadra.
Él mismo cargó el cuerpo y lo abandonó en una zona lejana, además ordenó a sus sicarios que viajaran a Sinaloa y Sonora para matar a toda la familia de El Rayo y así evitar una posible venganza. Sin embargo, su ejecución causó la furia de El Chapo, lo que rompió la tregua que existía entre las dos organizaciones criminales e inició una guerra que duró años.
Otro de los aliados de El Chapo Guzmán, Héctor Luis “El Güero” Palma Salazar, también está marcada por una historia de amor, traición y venganza. Llegó a convertirse en uno de los hombres de mayor confianza de Miguel Ángel Félix Gallardo, “El Padrino” o “El jefe de jefes”, al que traicionó para sumarse al cártel de Sinaloa.
Resentido, Félix Gallardo contrató a Rafael Clavel Moreno, un venezolano que enamoró a Guadalupe Leija, esposa de “El Güero Palma”, quien lo abandonó por él y se llevó a sus hijos con ella.
Clavel Moreno decapitó a la esposa de Palma Salazar y le mandó su cabeza en una hielera, a los hijos los lanzó de un puente y le envió al narcotraficante un video del momento. Clavel Moreno fue detenido en Venezuela y posteriormente asesinado en la cárcel.
En 1998, Osiel Cárdenas Guillén recibió el apodo de el “Mata Amigos”, luego de asesinar al narcotraficante Salvador Gómez Herrera, amigo y entonces jefe del Cártel del Golfo, pero también existió un episodio en particular que marcó su vida: cuando ordenó eliminar a Rolando Gómez, uno de sus más cercanos colaboradores, debido a que era esposo de su amante Hilda Flores “La Güera”.
Aunque Osiel Cárdenas tuvo varias novias, la más querida de todas era La Güera, a quien incluso protegía más que a su esposa, Celia Salinas Aguilar.
Un problema de pareja provocó la rivalidad entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) de Nemesio Oseguera “El Mencho” y sus aliados en Michoacán, como lo relata en el libro “Los Malditos 2. El último infierno” (editorial Grijalbo), el periodista J. Jesús Lemus.
Carlos Rosales, alias ‘El Tísico’, narró al autor desde la cárcel de Puente Grande, en Jalisco, que llegó a Michoacán con Cártel del Golfo que estableció una relación con la familia Valencia, principales vendedores de droga en la zona, El Mencho era parte de este grupo.
Oseguera Cervantes le presentó a su prima Inés. Ambos se enamoraron y tuvieron un hijo; esa relación personal impulsó la relación de negocios entre los Valencia (que se hacían llamar el Cártel del Milenio) y el Cártel del Golfo. Sin embargo, Inés se enamoró de Armando Valencia, lo que provocó una violenta ruptura con el Cártel del Golfo.
Osiel Cárdenas apoyó a Rosales y le envió sicarios de Los Zetas para abatir a la familia Valencia, quienes a su vez pactaron con el Cártel de Sinaloa, lo que dio origen al CJNG. Rosales fue asesinado en diciembre de 2015 en Parácuaro, Michoacán.