Una escena de película de terror fue lo que vio un jovencito de 17 años de edad ayer en la mañana cuando se asomó por la ventana de su casa en el sector La Lucha, de Carora, municipio Torres: el cuerpo del esposo de su mamá estaba colgado del techo con una cuerda.
Por José Sequera/MS | LA PRENSA de Lara
Lo que el muchacho no sabía es que su padrastro, identificado como Arévalo Jesús Infante Nieves (68) se había suicidado la noche del miércoles después de estrangular con el cable de un cargador a su mujer, Maryuri Coromoto Vargas (50) y la dejó muerta dentro de la vivienda.
Según contaron vecinos de la pareja, el miércoles se había ido la luz desde el final de la tarde, y lo usual era que cuando había un apagón, “Yayo” y “Maggie” -como era conocida la pareja-, salían al frente de su casa a refrescarse, sin embargo ellos no salieron.
Cuando ya las estrellas estaban brillando en el oscuro cielo, el hijo de “Maggie” regresó a su casa después de andar paseando por la calle. Tocó la puerta varias veces, pero como nadie salió, resolvió ir hasta casa de un amigo suyo que vive cerca.
“Él creyó que sus papás habían salido, además que ya era tarde y no había luz, prefirió ir a que un amigo de él que vive cerca, como suele hacer”, comentó uno de los vecinos de la pareja.
Ayer en la mañana, el joven volvió a su casa, volvió a tocar, y al igual que la noche anterior, no hubo respuesta. Al ver eso muy extraño, el adolescente se asomó por la venta por si veía a alguien dentro de la vivienda, y se consiguió con la imagen de su padrastro ahorcado.
Con tremendo susto, pero sin decirle a nadie lo que había visto, el muchacho se fue hasta la Subdelegación Carora del Cicpc, en Torres para alertar sobre el hallazgo, y temiendo por la vida de su mamá porque no sabía de su paradero.
Una comisión de la “petejota” llegó junto al muchacho hasta la vivienda, y después de forzar la puerta, entraron y comprobaron que además de “Yayo”, “Maggie” yacía muerta dentro de la vivienda.
Familia, vecinos y amigos de la pareja llegaron hasta la casa cuando se enteraron de lo sucedido. Entre murmullos, vecinos de “Yayo” y “Maggie” afirmaron que durante el tiempo que duró la interrupción del servicio eléctrico en ese sector, de la casa de ellos no salieron gritos ni súplicas.
Lo que sí comentaron es que ellos estaban tomando nuevamente su relación, pues se habían separado unos meses debido a un problema de nervios que sufrió el sexagenario, razón por la que había ido al estado Zulia, y desde hace pocas semanas había llegado a Carora.
“Maggie” trabajaba en el servicio de Mantenimiento y Limpieza de la Alcaldía del municipio Torres y fue descrita como una mujer trabajadora que siempre ayudaba a todo el que podía.