Las tierras aborígenes APY en Australia están llevando a cabo una matanza masiva camellos debido a la falta de agua en el área afectada por la sequía. En medio de los devastadores incendios forestales que se extienden por Australia, se dispararán y matarán hasta 10.000 camellos tras las quejas de que están bebiendo demasiada agua. La eliminación comenzará este miércoles y durará aproximadamente cinco días.
Por Infobae
Los funcionarios aborígenes en la remota región del noroeste escasamente poblada de la provincia de Australia del Sur dijeron que los animales salvajes están poniendo en peligro a los lugareños que luchan por obtener suficiente agua durante una sequía masiva. Las autoridades ahora planean disparar y matar a los camellos en las tierras Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara (APY), dijeron en un comunicado el lunes.
Según un comunicado oficiales posteado en la cuenta de las tierras aborígenes, “”Grupos extremadamente grandes de camellos y otros animales salvajes … están presionando a las comunidades aborígenes remotas en las Tierras APY”. Este explica que los animales son “amenazas para la comunidad, consumen sus escasos suministros de agua y alimentos y ponen en peligro a los viajeros.”
El Departamento de Medio Ambiente y Agua (DEA, por sus siglas en inglés) le explicó a CBS News que estiman que alrededor de 10.000 camellos están consumiendo y contaminando las limitadas fuentes de agua de la región. Por lo tanto, apoyan la medida del gobierno local de “exterminar de 5.000 a 10.000” de estos para poder contener la sequía que pone en peligro la vida de los locales.
“Esto ha resultado en daños significativos a la infraestructura, peligro para las familias y las comunidades, mayor presión de pastoreo en las Tierras APY y problemas críticos de bienestar animal ya que algunos camellos mueren de sed o se pisotean entre sí para acceder al agua”, dijo un portavoz. “En algunos casos, los animales muertos contaminaron importantes fuentes de agua y sitios culturales”.
Los tiradores profesionales cazarán a los animales desde helicópteros provistos por la DEA, “de acuerdo con los más altos estándares de bienestar animal”. Algunos de los camellos se dejarán donde los maten, pero los que sean accesibles serán quemados o enterrados, según The Australian.
Según las fuentes del gobierno australiano, hay alrededor de un millón de camellos salvajes en el inmenso desierto al centro del país.