El ex primer ministro australiano Tony Abbott afirmó que altos cargos malasios de “muy alto nivel” sospecharon al principio que el piloto del Boeing 777 de Malaysia Airlines (vuelo MH370) causó deliberadamente la catástrofe aérea hace casi seis años con un suicidio.
El 8 de marzo de 2014, este avión que despegó de Kuala Lumpur con destino a Beijing con 239 pasajeros a bordo desapareció misteriosamente. Nunca se ha encontrado ningún rastro del aparato en la zona de búsqueda de 120.000 km2 explorada en el sur del océano Índico frente a la costa de Australia.
Esta búsqueda marítima, la más importante de la historia, se interrumpió en enero de 2017. Las causas de la desaparición han sido objeto de numerosas especulaciones desde el principio. Es el mayor misterio de la aviación civil moderna.
En un documental transmitido por Sky News el miércoles, Abbott afirma que en los días siguientes a la desaparición le dijeron que Malasia sospechaba que el comandante había estrellado deliberadamente el avión.
“Entendí claramente que altos cargos del gobierno malasio pensaron, muy, muy pronto, que había sido un gesto suicida del piloto”, dijo. “No voy a decir quién dijo qué a quien”, agregó.
La familia y los conocidos del comandante a bordo, Zaharie Ahmad Shah, siempre han negado esta hipótesis. Muchos familiares de víctimas han acusado en el pasado a la aerolínea y al gobierno de Malasia de ocultar información sobre la tragedia. Ellos lo desmienten.
En julio de 2018, el equipo internacional de investigación emitía su informe final indicando que no había podido establecer la verdadera causa del accidente. Ahora, un solo país en el mundo sigue investigando: Francia. Y según informaciones del diario Le Parisien, la pesquisa dio un paso más.
Jueces e investigadores de la Sección de Investigación de la Gendarmería del Transporte Aéreo (SR GTA) viajaron a Estados Unidos entre el 22 y el 24 de mayo de 2019, a la sede de Boeing en Seattle. Una visita que había sido postergada varias veces, puesto que el gigante de la aeronáutica mostraba poco interés en cooperar.
“Algunos de los virajes anormales que realizó el 777 sólo pueden haber sido hechos manualmente, así que alguien estaba a cargo”, dijo una fuente cercana. Este importante dato plantea la cuestión de un accidente voluntario. “Es demasiado pronto para decirlo categóricamente, pero no hay pruebas de que alguien más pudiera haber entrado en la cabina del piloto”, dice un investigador.