Miles de personas permanecían retenidas este miércoles de noche a bordo de un crucero en la costa de California para ser examinadas por coronavirus, luego que pasajeros y miembros de la tripulación mostraran síntomas.
Las autoridades retrasaron el atraco del Grand Princess, que interrumpió su viaje a Hawái y volvió a San Francisco.
Un hombre de 71 años, que viajó en el mismo buque en su viaje anterior a México, murió después de contraer el nuevo virus, convirtiéndose en el primer caso fatal en California, informaron el gobernador del estado y el operador Princess Cruises.
“Estamos reteniendo ese barco, que también tiene a miles de pasajeros, frente a la costa, y realizaremos esas pruebas”, dijo Newsom en una conferencia de prensa.
Indicó que 11 pasajeros y 10 miembros de la tripulación estaban posiblemente enfermos.
La llegada del barco se retrasó para permitir “un mayor margen de tiempo” para realizar los análisis a “un número de pasajeros y miembros de la tripulación que han mostrado síntomas”.
Un total de 62 pasajeros que permanecieron a bordo del anterior viaje a México fueron aislados en sus habitaciones hasta que se realicen los exámenes, informó la compañía en una declaración a AFP, sin precisar si alguno de ellos ha mostrado síntomas.
“Por precaución se pidió a estos pasajeros y a otros posibles contactos con la tripulación que permanezcan en sus camarotes hasta que sean examinados por nuestro equipo médico”.
Según Newsom, unos 2.500 pasajeros más la tripulación estaban a bordo cuando el barco viajó a México. Según la compañía, la tripulación consta de 1.150 personas.
El Grand Princess pertenece a Princess Cruises, la misma compañía que operó el barco infectado por el virus que salió de Japón el mes pasado y en el que más de 700 personas a bordo dieron positivo.
Al menos seis personas que fueron hospitalizadas después de ser evacuadas del barco fallecieron.
AFP