Un marinero que estaba a bordo del portaaviones USS Theodore Roosevelt murió por coronavirus. Es la primera víctima fatal entre más de 600 casos confirmados entre su tripulación, según confirmó la Armada estadounidense.
El marinero, que dio positivo en la prueba de la enfermedad el 30 de marzo, fue hallado inconsciente el 9 de abril y colocado en la unidad de cuidados intensivos del hospital de la Marina en Guam, donde el Roosevelt está atracado.
El brote fue denunciado públicamente por el capitán del portaaviones, quien luego fue despedido por las autoridades de la Armada. El caso desató un escándalo que acabó con la renuncia del secretario de la marina, luego de que viaje para el despido en un discurso en el que insultó al saliente Brett Crozier.
Hasta el domingo, 585 miembros de la tripulación de Roosevelt habían dado positivo en el test de coronavirus.
Una investigación del brote de coronavirus de Roosevelt y eventos relacionados está en curso. El portaaviones está atracado en Guam desde el 27 de marzo.
Casi 4.000 miembros de la tripulación habían sido trasladados a tierra: unos mil marineros desembarcaron a fines de marzo en la base naval de Guam y otros 1.500 lo hicieron días después para comenzar una cuarentena en hoteles de la isla, tras dar negativo en la prueba del coronavirus.
“No estamos en guerra. Los marineros no deben morir. Si no actuamos ahora, estamos fracasando a la hora de cuidar a nuestro activo más confiable: nuestros marineros”, había escrito Crozier en su carta, que acabó siendo filtrada a The San Francisco Chronicle.
El propio presidente, Donald Trump, había criticado a Crozier por considerar inapropiado que escribiera una carta y que ésta “se difundiera por todas partes”, como si se tratase de “una clase de literatura”.