Los gobernadores de Nueva York y Nueva Jersey han empezado a revelar algunos detalles de los planes de reapertura este lunes, cuando el primer estado ha registrado 337 nuevas muertes por coronavirus y el segundo, 106.
Ya el gobernador Andrew Cuomo, de Nueva York, había dicho el pasado domingo que después del 15 de mayo -el día que acaba su orden de confinamiento- podrán empezar a abrir las industrias consideradas de bajo riesgo, como la construcción y las fábricas, y que estén en lugares del estado menos afectados por la pandemia.
Cuomo explicó este lunes que la cuarentena se prolongará en muchas partes del estado más allá del día 15 de mayo. El gobernador neoyorquino también adelantó que durante esta semana espera decidir si los colegios del estado abrirán o no antes de que termine el curso escolar. Añadió que se coordinará con los gobernadores Philip D. Murphy, de Nueva Jersey, y Ned Lamont, de Connecticut, para tomar la decisión.
Por su parte, el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, dijo en una entrevista en televisión que la ciudad estaba en su primera etapa de preparación de la apertura y sugirió que las playas públicas de la ciudad podrían abrir antes de que acabe el verano.
El gobernador Murphy dijo que el área metropolitana de la ciudad de Nueva York que pertenece a su estado será la que mayor coordinación deba tener con las entidades neoyorquinas. Es allí donde el coronavirus ha golpeado con mayor intensidad. Murphy advirtió que en el resto del estado “no creo que nos vean dando pasos idénticos”, aunque adelantó que estarían “armonizados”.
Respecto a la apertura de los negocios y las escuelas, el gobernador de Nueva Jersey dijo necesitaría ver una reducción más prolongada de las tasas de hospitalización e infección, más pruebas y un mayor seguimiento.
Estas declaraciones de los líderes políticos dan a entender que que el epicentro regional del brote -que incluye la ciudad de Nueva York y el norte del estado de Nueva Jersey- abrirán más tardes que otras zonas.