El asesinato de George Floyd en Minneapolis a manos de un policía no sólo generó actos y manifestaciones en contra de la violencia y el racismo en Estados Unidos y el mundo sino que activó también el regreso de Anonymous.
Por: Clarín
Los ciberactivistas no aparecía desde 2017 con tanta violencia. Y de la nada, tras la muerte de Floyd, pasaron a revelar datos, acusar gobiernos y destapar trapos sucios de gobiernos y personalidades de primer nivel global. Así, la OMS, estrellas de Rock, Donald Trump, Jair Bolsonaro y hasta filtraciones sobre suicidios famosos que ocultan accidentes circularon como reguero de pólvora en diferentes cuentas de Facebook y Twitter.
Pero tanto flujo de datos empezó generar la contra corriente de las fake news, y si bien muchos elogian el retorno de Anonymous, otros acusan al grupo de haber filtrado datos ya conocidos o con poco sustento. Eso es lo que ocurrió con una foto de Donald Trump desnudo que en las últimas horas circuló en todo el mundo.
La foto es en realidad un montaje creado por la artista plástica británica Alison Jackson poco antes de que Trump sea presidente de Estados Unidos, en noviembre de 2016. Jackson fantasea con un Trump electo armando fiestas en la Casa Blanca.
La imagen forma parte de su famosa colección Mental Images, en la que que imagina a todo tipo de personajes célebres en situaciones irreales. Y la persona que aparece en la foto no es Trump, sino un modelo maquillado que se parece a él. En otras imágenes se lo ve con un boxer con cruces esvásticas.
No es la primera vez que esta misma foto es usada para burlarse de Trump sabiendo que se trata de una fake news. En 2017, una cuenta de Twitter llamada “Defeat_GOP” (Derrota al Partido Republicano) posteó esa imagen con un texto que decía que un empleado de la Casa Blanca había sido despedido por sacarle una foto al presidente desnudo mientras era rociado con una pistola de bronceado.