El presidente de EEUU, Donald Trump, se atrincheró este jueves en su férrea defensa de la policía, pidió dejar de acusarles de racismo y desafió a los líderes demócratas del estado de Washington, al amenazarles con intervenir si no controlan una zona de la que se han retirado las fuerzas de seguridad.
Durante una visita a Dallas (Texas) para recaudar fondos para su reelección, Trump anunció que pronto firmará un decreto para “alentar a los departamentos de policía de todo el país a cumplir los estándares más actuales y profesionales para el uso de la fuerza“.
“Eso significa que hay que usar la fuerza, pero usar la fuerza con compasión. Pero si alguien es realmente malo, van a tener que hacerlo con mucha fuerza, con mucho poder“, dijo Trump durante una mesa redonda con empresarios y líderes religiosos en Dallas.
Con información de EFE // Reporte de Nathaly Salas Guaithero para VOA y lapatilla.com