La mayor guerrilla activa de Colombia, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), dejó en libertad el domingo a seis personas que mantenía secuestradas en el noreste del país, elevándose a ocho los liberados en los últimos tres días, informó el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Las liberaciones de dos integrantes de la Policía Nacional y de cuatro civiles se produjeron, en dos procesos separados, en zona rural del departamento de Norte de Santander, cerca de la frontera con Venezuela, en misiones humanitarias en las que participaron la Defensoría del Pueblo y representantes de la Iglesia Católica.
“Los equipos del CICR que acudieron a las zonas verificaron que las seis personas se encontraban en adecuadas condiciones de salud para su traslado”, dijo un comunicado del organismo humanitario.
Los efectivos de la policía llevaban 75 días privados de la libertad, mientras que uno de los civiles, una mujer, llevaba cuatro meses en poder del ELN.
El viernes el mismo grupo rebelde dejó libres en el departamento de Arauca, también cerca de la frontera con Venezuela, a dos empleados de una de una compañía que presta servicios en el sector petrolero.
Conformado por más de 2.000 combatientes y considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, el ELN realizó en enero de 2019 un ataque con un carro bomba contra una academia policial en Bogotá que dejó 22 cadetes muertos, cerrando la posibilidad de iniciar un diálogo de paz con el Gobierno del presidente Iván Duque. (https://reut.rs/2Yx0d25)
El mandatario se niega a iniciar conversaciones con esa guerrilla fundada en 1964 hasta que suspenda los secuestros, el reclutamiento de menores de edad, la siembra de minas antipersonales, liberen a las personas que mantienen secuestradas y detenga los ataques contra la infraestructura económica del país.
El grupo rebelde, acusado de financiarse del secuestro, la extorsión, el narcotráfico y la minería ilegal, ha fracasado en la búsqueda de un acuerdo de paz con otros gobiernos para acabar con una confrontación que ha dejado 260.000 muertos, debido a sus posiciones radicales, una cadena de mando difusa y disenso entre sus filas.
El jefe del equipo negociador del ELN, Pablo Beltrán, anunció a finales de mayo que el grupo rebelde estaría dispuesto a participar en un alto el fuego global de tres meses que se está discutiendo en las Naciones Unidas para contener la propagación del coronavirus.
Algunos dirigentes del grupo rebelde se encuentran en La Habana, pero el gobierno de Cuba no ha respondido una solicitud de Colombia para que los extradite.
Reuters