Tasa de infección por coronavirus en Nueva York baja a 0,9%

Tasa de infección por coronavirus en Nueva York baja a 0,9%

 

 





 

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, informó este jueves que la tasa estatal de infección por COVID-19 ha vuelto a bajar a un mínimo histórico tras pasar del 0,96 % de ayer al 0,9 % y urgió a las universidades a que elaboren un plan para retomar la actividad presencial en el primer semestre del curso próximo, que comenzará en otoño.

En la que ha sido la última conferencia diaria para actualizar los datos de COVID-19, Cuomo detalló que durante el día de ayer se realizó el mayor número de pruebas de detección del patógeno hasta la fecha, con 68.541 tests, de los cuales solo 618 fueron positivos.

También se volvió a registrar el menor número de hospitalizaciones, si bien se produjo un repunte en los fallecimientos contabilizados para el miércoles, con 29, unos 11 más que el día anterior, cuando se registró el número de decesos más bajo hasta la fecha, con 17.

En la ciudad de Nueva York, otrora epicentro mundial de la pandemia, se registró una tasa de infección de apenas el 1% y se prepara para reabrir el próximo lunes.

El gobernador dijo que desde este miércoles y hasta el fin de semana, expertos sanitarios continuarían haciendo un seguimiento a las métricas de la Gran Manzana para acabar de confirmar su reapertura, por lo que Cuomo recomendó a los dueños de los negocios que comiencen a planear su vuelta.

Insistió en lo importante de cumplir ciertas normas y recordó que durante la fase dos podrán volver solo el 50% de los trabajadores de oficinas, a los que se les debe tomar la temperatura y facilitar barreras de plexiglás si no es posible mantener los dos metros de distancia física recomendada.

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, dijo en su rueda de prensa matutina que espera que unos 150.000 o 200.000 empleados vuelvan a la ciudad y aseguró que también reabrirían los parques infantiles, una decisión que llega después de que se viralizase un video en el que miembros de la comunidad judía irrumpían en una zona de columpios a la fuerza en Williamsburg (Brooklyn) y criticaban la decisión del alcalde de mantener estas zonas cerradas.

Con respecto a la vuelta de los restaurantes, Andrew Cuomo indicó que deberán ofrecer sus servicios únicamente en el exterior o para llevar y manifestó que las mesas deberán estar al menos a dos metros de distancia y que los empleados deberán llevar mascarillas en todo momento.

Las peluquerías y salones de belleza también podrán volver al 50 % de la ocupación con cita previa, si bien todavía están prohibidos los servicios de masajes, la depilación y los servicios relacionados con la cara y las uñas.

Animó a todos los trabajadores que vuelvan a la actividad este lunes a que se hagan un test antes de reabrir y pidió repetirlos cada dos semanas y disponer de un registro de los clientes para facilitar el rastreo si alguien da positivo.

Cuomo anunció además que firmará una orden ejecutiva para fortalecer las sanciones contra aquellos comercios, en especial bares y restaurantes, que no cumplan con las normas de contención del virus y advirtió de que no acatar las reglas podría acarrear la pérdida de la licencia de venta de alcohol o una orden para cerrar el negocio “de forma inmediata”.

En la orden ejecutiva también se establecerá que los negocios tendrán competencias sobre las terrazas en donde ahora sirven y pidió de nuevo a las administraciones locales que “hagan su parte”.

Preguntado por el efecto de las protestas respecto a la tasa de infección, Cuomo confía en que no sea significativo “porque en el momento en el que se produjeron la tasa de infección estaba sobre el 1 % y ya han pasado tres semanas y no hemos visto nada”.

VUELTA DE LAS UNIVERSIDADES

Andrew Cuomo expresó también que ofrecerán una guía a las universidades para permitir la vuelta de la actividad presencial para el primer semestre del curso, cuyo inicio se prevé a finales de septiembre, e indicó que los campuses deben desarrollar un plan para garantizar la seguridad sanitaria.

En la guía estatal se recoge la necesidad por parte de las universidades de demostrar su capacidad para mantener la distancia social, proveer de equipos de protección individual y limpiar y desinfectar las instalaciones, entre otros requisitos.

Las instituciones universitarias también deberán trazar planes de contención, monitorización y posibles cierres en donde se detalle cómo identificar y aislar casos positivos o definir la frecuencia con la que se practican pruebas de detección del virus.

EFE