Con el arresto del empresario colombiano Álex Saab, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha perdido a uno de los artífices de los esquemas internacionales que le proporcionaban a su gobierno los flujos necesarios de efectivo provenientes del petróleo y el oro ilegales, en medio de las sanciones estadounidenses.
Álex Naim Saab Morán fue arrestado el viernes 12 de junio en el aeropuerto Amílcar Cabral, de la isla Sal en Cabo Verde, cuando el avión privado en el que viajaba se detuvo a abastecerse de combustible. La portavoz del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Nicole Navas, confirmó la captura de Saab, quien está acusado de dirigir una multimillonaria operación de lavado de dinero, mediante la cual se desviaban dineros públicos a cuentas en el extranjero.
Saab está, además, acusado de utilizar empresas fachada para enviar a Venezuela alimentos vencidos y a precios inflados a través del programa de ayuda del Gobierno denominado Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
Según un reporte del diario El Tiempo, agencias de inteligencia estadounidenses venían haciendo seguimiento a los movimientos de los aviones utilizados por Saab para desplazarse entre Venezuela, Alemania, Rusia, Italia e Irán.
No está claro exactamente por qué Saab aterrizó en Cabo Verde.
Una fuente del gobierno colombiano le dijo a El Tiempo que Saab había ido a Cabo Verde para reunirse con una comisión de Irán con el fin de liberar un buque petrolero detenido en la isla. Otros informes indican que él volaba de Venezuela a Irán y que se detuvo para repostar en Cabo Verde. El Tiempo informó que su avión había despegado de Teherán.
Poco después de la detención de Saab, el Gobierno venezolano emitió un comunicado de prensa en el que decía que él estaba haciendo escala en Cabo Verde como parte de un viaje para adquirir alimentos, medicinas “y otros bienes de carácter humanitario” para atender la crisis generada por la pandemia del coronavirus. El mismo comunicado señalaba que dicho arresto era ilegal.
Mientras que el Gobierno venezolano exige que se libere a Saab, Washington ya ha comenzado a gestionar su extradición con las autoridades de Cabo Verde, según dijo el fiscal general de la nación insular, José Landim, al portal de noticias A Nação.
Análisis de InSight Crime
El arresto de Álex Saab no solo priva a la administración de Maduro de un aliado clave, sino que además es un golpe a la capacidad del Gobierno para sostenerse con ganancias ilícitas.
Alberto Ray, analista y experto en seguridad venezolano, dijo en comunicación con InSight Crime que el arresto de Saab “va a generar un problema de flujo de caja muy fuerte”, dado que él era el arquitecto de las redes generadoras de dinero más importantes del régimen, “especialmente a través de drogas, oro y petróleo”.
Las rentas por actividades ilícitas representaron el 32 por ciento de los ingresos del Gobierno venezolano, es decir, alrededor de US$14.400 millones de dólares en 2018, según datos de Ecoanalítica, empresa dedicada al análisis del entorno macroeconómico, y compilados por la revista Dinero. El contrabando de oro generó alrededor de US$2,71 mil millones, la gasolina alrededor de US$2,79 mil millones, y el tráfico de drogas alrededor de US$2,65 mil millones, según el informe de Dinero.
Si bien no hay cifras similares para 2019 y 2020, las finanzas del Gobierno de Maduro se han visto duramente afectadas por las sanciones y por la drástica caída de los precios del petróleo, lo que lo ha obligado a depender aún más de fuentes ilícitas, especialmente del oro.
Saab fue fundamental en la negociación de acuerdos con otros países debido a las asfixiantes sanciones. Ayudó a vender oro venezolano a países como Turquía y participó en negociaciones con Irán para llevar petróleo a Venezuela, como lo indica un informe de Bloomberg.
Las empresas de Saab o vinculadas a él están presentes en diversos sectores económicos, como la agricultura, la construcción, el petróleo, la minería y la producción de alimentos. Sus empresas han sido señaladas por lavado de dinero obtenido gracias al control ilícito de las tasas de cambio por parte del Gobierno de Venezuela.
Con el arresto de Saab, Maduro ha perdido a un miembro de confianza de su círculo interno, justamente cuando enfrenta una acusación por narcotráfico y cuando Estados Unidos ha puesto precio sobre su cabeza.
Parece que Maduro incluso confió su riqueza personal al empresario colombiano. En caso de que Saab sea extraditado a Estados Unidos, sería invaluable para las autoridades, dado que podría proveer información sobre los negocios ilícitos de Maduro y sobre sus vínculos con redes criminales en Venezuela y en otros países.