Los avances en la investigación del caso del empresario Jeffrey Epstein mantienen el foco sobre el príncipe Andrés. Surgen nuevas preguntas sobre el papel y la relación que mantuvo el hijo de la reina Isabel II con el empresario acusado de abuso sexual de menores y su pareja Ghislaine Maxwell.
Por infobae.com
Maxwell esta detrás de las rejas luego de haber sido arrestada en New Hampshire la semana pasada. La ex novia y mano derecha del empresario se presentará ante el tribunal el próximo martes en Nueva York y podría enfrentar hasta 35 años de prisión si es declarada culpable de “facilitar” las menores que fueron sometidas a los abusos.
Andrés intenta mantener su bajo perfil en el Reino Unido, luego de haber renunciado a su responsabilidades en noviembre de 2019, cuando salieron a la luz graves acusaciones de parte de presuntas víctimas de abuso sexual.
“Está indisolublemente vinculado con esta historia, no hay una estrategia de salida “, sostiene el agente británico de relaciones públicas Mark Borkowski a NBC News.
Borkowski, que trabajó junto la fallecida estrella del pop Michael Jackson, creé que el futuro de Andrés depende de lo que Maxwell revele a la justicia. Sugirió que sería importante que el hijo de la reina guarde silencio e invite a las autoridades estadounidenses “a reunirse con él en su territorio” en el Reino Unido, mostrando así su voluntad de cooperar. Andrés reconoció en una entrevista a la BBC que conocía a Epstein y a Maxwell, la ex novia del financiero, pero negó haber actuado mal.
En la entrevista que le dio a la BBC, que lo dejó muy mal parado, reconoció que Maxwell le había presentado a Epstein y que en 2010 se quedó durante cuatro días en la casa del empresario en Nueva York.
El príncipe negó todas las acusaciones que señalaban que él había tenido relaciones sexuales con una menor de 17 años. “No recuerdo haberme reunido con esa señora”, dijo a pesar de la foto en que se lo ve con Virginia Roberts Giuffre, una de las víctimas, y Maxwell en la mansión del financista.
Hoy en el Reino Unido algunos aseguran que el príncipe le huye al caso.
Audrey Strauss, fiscal federal del Distrito Sur de Nueva York, dijo: “No voy a a relevar la situación de ninguna de las personas en esta investigación, pero diré que nosotros daremos la bienvenida al príncipe Andrés si se acerca a conversar con la justicia. Nos gustaría tener el beneficio de su declaración“.
Por su parte, los abogados del hijo de la reina Isabel II han dicho que ofrecieron en más de una ocasión el príncipe fuera testigo para colaborar con las autoridades estadounidenses. Por el momento, Andrés es solo un testigo de la causa, de esta manera no está obligado a viajar ni comparecer frente a la justicia americana. Aunque “puede convertirse rápidamente en un objetivo, dependiendo de cuáles sean sus respuestas a las preguntas”, explicó el analista legal de NBCNews, Danny Cevallos.
Cevallos, analizó la situación de Andrés. “Si defendiera al príncipe le diría que nunca abandone el Reino Unido y solo haga declaraciones escritas cuidadosamente examinadas”.
Hasta hoy todo indica que el hijo de la reina sigue esa estrategia, ya que canceló sus vacaciones programadas a España. En el Reino Unido está protegido.
El caso Epstein sigue en plena investigación y con la detención de Maxwell, Andrés está en la mira. Algunos especulan que si llegara a ser acusado de algún delito, la justicia norteamericana podría pedir la extradición del monarca. Sin embargo, los expertos legales desestiman esa posibilidad debido a que podría desencadenar un conflicto diplomático entre ambas naciones.
Mark Stephens, abogado que representó al oficial de caballería británico James Hewitt después de las acusaciones de un romance con la princesa Diana, dijo que las autoridades estadounidenses estaban tratando de “atrapar” a la realeza pero que era poco probable que él fuera extraditado.
Para Stephens, Andrés jamás será convocado a los Estados Unidos porque está protegido por el principio de inmunidad soberana. “Si los fiscales estadounidenses quisieran recopilar información, podrían hacerlo a través de testimonios escritos o viajando a Reino Unido. Andrés no aceptará dejar su país” .
Incluso si fuera extraditado a Estados Unidos, el tío de William y Harry no estaría “obligado a dar pruebas”, agregó Stephens. “Puede citar a alguien a la Corte, pero tiene que presentar pruebas”, dijo, citando el derecho legal de un individuo a guardar silencio.
Sin embargo, Juliet Sorensen, ex fiscal federal y profesora de derecho en la Universidad Northwestern, detalló que no cree que la realeza esté protegida por la inmunidad soberana.
“La inmunidad soberana no se aplicaría a un caso en el que un soberano haya participado en actividades delictivas como es el tráfico sexual y la explotación de menores y mujeres jóvenes”.
Mientras tanto, Maxwell permanece tras las rejas. Los fiscales consideraron que presenta un riesgo de fuga “extremo” debido a su acceso a fondos sustanciales y pasaportes estadounidenses, franceses y británicos.
El martes 14 de julio tendrá su primera audiencia donde se leerán todos los cargos de los que se acusa. “Maxwell desempeñó un papel fundamental para ayudar a Epstein a identificar, hacerse amigo y preparar a las víctimas menores por abuso”, dijo el fiscal Strauss. “En algunos casos, Maxwell participó del abuso”.
Los asesores de Andrew deberán estar atentos a cualquier testimonio de Maxwell, ya que el caso permanecerá en los titulares de los medios británicos, dejando al príncipe en el ojo de la tormenta hasta que se aclare el oscuro caso.