Después de las recientes sanciones del Reino Unido impuestas a dos organizaciones de Corea del Norte, desde Pionyang advirtieron este sábado que el país europeo será “obligado a pagar el precio”, por esta medida.
A principios de esta semana, Reino Unido colocó en su lista negra a 49 personas y organizaciones de varios países bajo su nuevo régimen de derechos humanos, incluidas dos entidades norcoreanas, una Oficina del Ministerio de Seguridad del Estado y la Oficina Correccional del Ministerio de Seguridad Popular.
“Condenamos firmemente y rechazamos la osadía del Reino Unido de imponer sanciones a las instituciones responsables de la seguridad de nuestro país como una interferencia violenta en los asuntos internos”, señaló un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores norcoreano.
La medida adoptada por el país europeo fue calificada por Pionyang como “un plan político flagrante” para sumarse a la “política hostil de Estados Unidos”.
Las sanciones impuestas implican el congelamiento de activos e impiden canalizar fondos a través de bancos británicos. Corea del Norte sostiene que estas acciones son “fabricaciones” proporcionadas por desertores norcoreanos, según recoge la agencia de noticias Yonhap.