El pulso entre los líderes de la Unión Europea en la cumbre que se celebra el sábado en Bruselas amenazaba con hacer descarrilar los planes para crear un fondo de estímulo masivo que reactive sus golpeadas economías por la pandemia del coronavirus.
“Estamos en un impás ahora. Es más complejo de lo que se esperaba”, dijo el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, en un video publicado en Facebook mientras los líderes de los 27 países de la UE se acercaban al final del segundo día de negociaciones. “Hay muchos asuntos sin resolver todavía”.
El comisario encargado del presupuesto en el brazo ejecutivo del bloque recordó a los líderes -que llevaban mascarillas y mantenían la distancia entre ellos- que el COVID-19 sigue entre ellos y es necesario actuar.
“Tan solo un recuerdo solemne: la coronacrisis no ha terminado: las infecciones están subiendo en muchos países”, tuiteó Johannes Hahn. “¡Es hora de alcanzar un acuerdo que nos permita aportar el apoyo urgentemente necesitado para nuestros ciudadanos + economías!”
En medio de una pandemia que está provocando en muchas economías europeas su peor crisis económica desde la Segunda Guerra Mundial, los líderes se reunieron el viernes para debatir un fondo propuesto de recuperación de 750.000 millones de euros (856.000 millones de dólares) y un presupuesto de la UE para 2021-27 de más de 1 billón de euros.
No obstante, un grupo de estados norteños prósperos y fiscalmente “frugales” liderado por Holanda bloqueó el progreso en la primera cumbre cara a cara que se celebra desde los confinamientos que comenzaron en la primavera boreal en todo el continente.
Estos países están a favor de préstamos reembolsables más que de subsidios gratis para las endeudadas y golpeadas economías sobre todo del arco mediterráneo, al tiempo que quieren control sobre cómo se gastan los fondos.
Las esperanzas de acuerdo crecieron más temprano en el día, cuando el presidente de la cumbre, el jefe del Consejo Europeo Charles Michel, propuso revisar el paquete completo que fue diseñado para aliviar las preocupaciones holandesas.
Con arreglo a las nuevas propuestas, la parte de las transferencias a fondo perdido establecidas en el plan de recuperación se reducirían a 450.000 millones de euros desde los 500.000 millones previstos. Asimismo, se añadiría un nuevo “freno de emergencia” al desembolso.
No obstante, las esperanzas de que esto fuera suficiente para llegar a un pacto se desvanecieron con rapidez.
“Hay muy pocas posibilidades de se llegue a un acuerdo esta noche. Muy pocas”, dijo un diplomático. Según indicó, los “frugales” estaban presionando en favor de mayores recortes al fondo y reembolsos más altos a los pagadores netos en el presupuesto central de la UE, entre otras exigencias.
(1 dólar = 0,87 euros)
Reuters