Alianza Bravo, ABP emite comunicado en relación al tema electoral propuesto por el régimen venezolano, donde ratifican su posición desmarcándose de una ruta que no comprende la tarea inicial del Cese de la Usurpación. El llamado es a conformar una verdadera unidad, bajo el propósito primero de ponerle fin a la tiranía del país, amprándose en las herramientas constitucionales y tratados internacionales.
Alianza Bravo Pueblo
Todo el esfuerzo de cualquier trabajo unitario debe concentrarse en buscar el Cese de la Usurpación.
ABP valora el llamado G4, así como de los partidos que se han pronunciado, finalmente, en rechazo de la farsa montada por el régimen y sus acólitos para el 6D. Esa posición está en línea con el sentimiento abrumadoramente mayoritario del pueblo venezolano, que, escamado de tanta trampa y engaño, rechaza por igual falsas elecciones y parodias de diálogo.
También está en línea con la posición ya tempranamente fijada por los principales aliados externos de nuestra lucha libertaria: Los Estados Unidos, Colombia, Brasil, el Grupo de Lima y la Organización de los Estados Americanos, OEA. Con esta declaración, la llamada mesita, los alacranes y alguna que otra viuda de la cohabitación, quedan abiertamente expuestos como agentes del régimen, si participan de su farsa.
Dado que este paso, aunque es en la dirección correcta, es insuficiente, ABP plantea que, habiendo un amplio rechazo nacional e internacional contra el fraude, nos corresponde centrarnos y concentrarnos todos en una única y absoluta prioridad: El Cese de la Usurpación. No hay otra tarea. No hay otro objetivo. Muchas cosas tendremos que hacer para reconstruir a Venezuela, pero todas vienen después de la salida del tirano y ninguna es posible sin la salida del tirano.
Y para concentrarnos en esa tarea única, que es la que realmente nos une, ABP plantea la urgencia inaplazable de reformular la unidad, desde una mera plataforma partidista (en realidad de 4 partidos) dedicados a buscar condiciones electorales, más bien trabajemos por lograr una gran coalición nacional e internacional por la liberación de Venezuela, en la que tengan presencia determinante, además de los partidos políticos, la sociedad civil, academias, iglesias, universidades, estudiantes, trabajadores, empresarios y esa inmensa diáspora de 6 millones de venezolanos aventados de Venezuela por la tiranía.
Luchar por una colisión que haga posible aplicar en Venezuela los mecanismos contemplados en el CONCEPTO DE RESPONSABILIDAD DE PROTEGER (R2P/Organización de las Naciones Unidas, ONU), o los que estipula LA CONVENCION DE PALERMO, también las opciones que forman parte del TRATADO INTERAMERICANO DE ASISTENCIA RECIPROCA (TIAR).
Una reformulación de la unidad con claridad estratégica, solides ética, una dirección política que se corresponda con esta nueva fase de la lucha (cerrada la vía electoral por el régimen) y un sentido patriótico que deje claro que el interés supremo de Venezuela está por encima de intereses y ambiciones individuales o partidistas y que toda acción por retomar la ofensiva para derrocar la tiranía, debe construirse sobre esa inmensa y poderosa plataforma política que significa tener un Presidente Interino que cumpla autónomamente sus obligaciones, sin sombras que desmeriten su autoridad, con base al 233 constitucional, y reconocido por 60 países, la OEA, el Parlamento Europeo y el BID. Esa es una fuerza gigantesca que no la tuvo nunca la oposición o resistencia en ninguno de los tantos países que han superado tiranías. Tener una dirección política a la altura de esa fuerza, es nuestra responsabilidad, esa es la tarea.
Edwin Luzardo
Presidente ABP
04 de agosto de 2020