Le suplicó a su entrenador que tirara la toalla varias veces, perdió por nocaut y la UFC lo despidió en su debut

Le suplicó a su entrenador que tirara la toalla varias veces, perdió por nocaut y la UFC lo despidió en su debut

Austin Hubbard celebra su victoria ante Max Rohskopf el 20 de junio. | Foto: UFC

 

Su pelea recorrió el mundo aquel 20 de junio del 2020 cuando hizo su debut en UFC, la empresa de artes marciales mixtas más importante del mundo. Sin embargo, el motivo por el que todos hablaron de Max Rohskopf no fue por un tremendo nocaut o una gran sumisión, sino todo lo contrario, por la forma en la que perdió.

Por Infobae





“Detenla”, “Ya no quiero hacer esto”, fueron las súplicas del luchador a su entrenador Robert Drysdale al término del segundo round de aquel combate frente a Austin Hubbard por el UFC Las Vegas 3.

El joven de 25 años había llegado al octágono con poco tiempo de preparación ya que la UFC le informó que podría debutar en ese evento como reemplazo cinco días antes.

Fueron hasta en nueve ocasiones las que el peleador le suplicó a su entrenador que detuviera la pelea y arrojara la toalla. Del otro lado, la respuesta de Drysdale era que debía continuar, aunque sea hasta terminar el último round.

Pese a que había salido bien en el primer asalto, Austin Hubbard se impuso y lo castigó con dureza. Finalmente, el combate no se extendió más allá del segundo round y Rohskopf se retiró pero no decisión de su esquina, sino que debió acudir a una de las autoridades de la Comisión Atlética de Nevada (NSAC) para que detuviera el combate.

Ahora, a casi dos meses de su debut, la propia empresa anunció la desvinculación del oriundo de Ohio, según indicó el portal especializado MMA Figthing.

“Me auto-boicoteé. Incluso cuando estaba luchando en la escuela secundaria, era el mejor en el estado y terminé en tercer lugar porque me auto-boicoteé”, aseguraba Rohskopf en una entrevista con el mismo medio cuatro días después de su estreno como luchador de UFC.

“Eso es exactamente lo que hice en mi pelea con Austin. La mierda se puso difícil, miré a mi entrenador y le dije: ‘Ya no quiero estar aquí’. No porque no quisiera estar allí, sino porque pensé que no merecía estar allí “, se lamentaba el luchador de peso ligero.

“Creo que lo que hizo mi mánager fue 100% acertado. Ha estado en el deporte el tiempo suficiente para saber cuándo alguien tiene la capacidad y el talento para hacerlo. He estado rodeado de muchachos que han ganado títulos mundiales en múltiples deportes (kickboxing, boxeo, jiu-jitsu, lucha libre, MMA) y todos los que me han visto entrenar saben que tengo las habilidades y la capacidad para hacerlo. Simplemente no lo mostré el sábado. No es culpa de nadie que yo estuviera en esa situación excepto la mía”, consideró.

Tras encadenar cuatro victorias consecutivas por sumisión y una polémica derrota en su estreno en UFC, Max Rohskopf deberá buscar nuevos aires de cara a futuro ya que ha dejado de pertenecer a la compañía.