El embajador de Colombia ante EE.UU., Francisco Santos, anunció este lunes que evalúa “iniciar acciones legales” contra el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, quien aseguró que el diplomático y otras personas del entorno del expresidente Álvaro Uribe fueron cercanas a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), la organización que el ahora detenido lideró.
“Ante las aseveraciones que hoy vuelve a hacer, evalúo iniciar las acciones legales correspondientes en su contra”, señaló Santos en una carta fechada en Washington y difundida en su cuenta de Twitter.
Santos respondió así a unas afirmaciones contenidas en una carta que Mancuso, quien permanece en un centro de detención del condado de Irwin (Georgia, EE.UU.), envió al exministro y gestor de paz Álvaro Leyva Durán, quien la hizo pública este lunes.
Mancuso asegura que en Colombia fue “silenciado” para que no dijera lo que sabía de vínculos de políticos con paramilitares, y añade que está dispuesto a contar la verdad de los crímenes de las AUC.
Según afirma, “se han utilizado medios coercitivos” para intimidarlo, tales “como torturas, amenazas, persecución judicial a través de montajes” para tratar de callarlo.
“Colombia ya sabe lo que me ocurrió, como venganza criminal y para callarme fui extraditado, debido a que relaté cómo colaboradores, funcionarios cercanos al Gobierno del presidente Álvaro Uribe, como Francisco Santos, hoy embajador de Colombia en Estados Unidos (…) fueron personas muy cercanas con las AUC”, indicó.
Pero Santos respondió que las aseveraciones de Mancuso “son las mismas que hizo hace 13 años, con ninguna prueba distinta a su palabra, y que jamás ha podido demostrar en ninguna instancia”.
El diplomático apuntó que la Fiscalía General de Colombia “lleva 13 años investigando dichas afirmaciones y jamás ha encontrado mérito alguno para ningún tipo de imputación por parte de la justicia”.
El embajador colombiano puntualizó que se reunió con Mancuso “como periodista del diario El Tiempo y como director de la Fundación País Libre, en una gestión humanitaria para obtener la liberación de un secuestrado”.
“En lo personal, como siempre, estoy a la orden de las autoridades, en una vida que ha sido pública y sin conspiraciones ni dobles juegos”, agregó Santos, quien señaló que los crímenes de Mancuso “le han valido ya 10 años de prisión y seguramente en Colombia lo esperan muchos más”.
Mancuso y otros 13 altos exjefes de las AUC fueron extraditados a EE.UU. el 13 de mayo de 2008 porque a pesar de haber dejado las armas y acogerse a la Ley de Justicia y Paz durante el Gobierno de Uribe (2002-20010), se les acusó de seguir delinquiendo.
“Colombia no conoce la verdad, porque no hubo ni existe interés político de que esto ocurriera ni ocurra, se rasgan las vestiduras exigiendo verdad, pero hipócritamente se impide la reconstrucción de la misma, se instrumentaliza la justicia como forma de venganza, el proceso de Justicia y Paz terminó siendo peor que un proceso ordinario, donde la transicionalidad brilla por su ausencia”, asegura Mancuso.
Colombia ha pedido la extradición de Mancuso a Estado Unidos, pero la defensa solicitó la semana pasada ante una corte de ese país que se suspenda su deportación a territorio colombiano y se permita su traslado a Washington.
Mancuso fue responsable directo como jefe de las AUC de miles de asesinatos y otros crímenes de lesa humanidad durante el conflicto armado en Colombia.
EFE