Este hubiera sido el destino de Meghan y Harry si se quedaran en la realeza, según la reina

Este hubiera sido el destino de Meghan y Harry si se quedaran en la realeza, según la reina

La Reina Isabel II con Harry y Meghan

 

Enrique de Gales, mejor conocido como príncipe Harry y su actual esposa, la exactriz Meghan Markle, se negaron a seguir los patrones y estándares dirigidos por la Realeza Británica que se cumplían desde siglos atrás. Al anunciar su renuncia como “miembros activos” de la familia real, se generó mucha controversia.

Por Jazmin Lopez / Soy Carmín





Era algo que se veía venir, pues desde el inicio de la relación amorosa entre Harry y Meghan, la pareja demostró que no se ajustaban a ciertos protocolos con los que tal vez, no estaban de acuerdo. Por esa razón, muchos pensaron que tarde o temprano, esa relación iba a fallar. Sin embargo, como ya lo sabemos, Meghan Markle y el príncipe Harry poco después de confirmar su noviazgo, anunciaron su matrimonio.

Si bien al inicio de su unión matrimonial permanecieron en Reino Unido y se ajustaban a las agendas implantadas por la Realeza Británica asistiendo a cierto tipo de reuniones para atender determinados temas, esto pareció no ser del agrado de la joven pareja, y decidieron independizarse, lejos de los protocolos y las estrictas reglas que conlleva formar parte activa como miembro de la familia real desde un enfoque más personal. ¿Pero qué hubiera pasado en caso de que actualmente formaran parte activa dentro del ámbito real? La reina Isabel II ya tenía todo un plan ideado para Meghan y Harry. Algo completamente inesperado.

La Reina Isabel quería ofrecer tanto honor como responsabilidad a Harry y Meghan al otorgarles un papel en su amada Commonwealth of Nations británica, una muestra de confianza muy personal. Se dice Isabel II del Reino Unido, había escuchado y leído gran parte del deseo de Harry y Meghan de vivir una existencia ‘ordinaria’. Razón por la cual ya tenía ideado un plan para ellos: que vivieran en Malta, un archipiélago ubicado en el Mediterráneo central entre Sicilia y la costa norteafricana.

En Malta, la reina Isabel durante su juventud había probado la vida “normal” como esposa de un joven oficial naval, no como hija de un rey. Sin embargo, poco después tuvo que volver a “cumplir” su papel como reina debido a la sangre azul que corre por sus venas.

Un período poco conocido pero que realmente sucedió en su propia vida: sus ‘Momentos de Malta’ entre 1949 y 1951, cuando Philip se desempeñaba como oficial naval en la isla mediterránea, casándose al poco tiempo con él.

Los planes acerca de la función que cumplirían los Duques de Sussex, ya estaban muy claros para la reina Isabel. La Sudáfrica moderna, con su gobierno de mayoría negra, podría haber sido el lugar ideal para que el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle desempeñaran cargos importantes. Sin embargo, los planes de la reina se derrumbaron cuando la joven pareja anunció su despedida e incluso, su mudanza hacia otro país. Actualmente, Meghan y Harry y su hijo Archie, radican en Estados Unidos, específicamente en la ciudad de Los Angeles.

Después de todo, la relación amorosa entre Meghan y Harry había florecido en África, por lo que tal vez, o en algún otro lugar de la Commonwealth, su desarrollo como miembros activos de la familia real pudo haber sido muy benéfico y satisfactorio. Pero sin lugar a dudas, el giro que dio el mundo de la realeza cuando Meghan y Harry anunciaron su despedida, ha marcado un antes y un después. Incluso, hay quienes califican a este suceso como una “tragedia”.

“La tragedia”, dice un informante del palacio, “fue que el objetivo más amplio de la Reina Isabel era en realidad unir a todos, no separarlos.

¿Realmente esto afectó de manera profunda a la realeza británica? ¿Cómo funcionarían las cosas si Harry y Meghan aún fuesen miembros activos? Obviamente, había puntos de principio que defender, pero Edward, un analista cercano de la realeza, se centra mucho en los detalles, negándose a observar un panorama general positivo.

“Este tipo de negociación familiar requiere confianza, junto con la aceptación de incertidumbres y ambigüedades. Visualizar el alejamiento de esta pareja me parece algo inconcebible”.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que no puede haber garantías absolutas para ninguna de las partes. Christopher Geidt, secretario privado de la reina Isabel, lo manejó de manera distinta, afirmando lo siguiente: “Tenían las habilidades”.

 

Sí, tal vez Meghan Markle y el príncipe Harry hubieran hecho un excelente trabajo en Sudáfrica, pero la realidad que ellos mismos han elegido, es muy distinta. Si bien su lazo con la familia real siempre los acompañará, lo cierto es que actualmente cuentan con mayor libertad para llevar a cabo ciertos proyectos personales que tal vez, les serían imposibles de realizar si continuasen estrictamente siguiendo los protocolos de la realeza.