Jennifer Aniston es probablemente una de las caras más reconocidas en el mundo del entretenimiento. Desde que salió en “Friends” ha marcado tendencias, y desde entonces no ha parado. Pero antes de ser un ícono, Aniston tuvo un duro comienzo en Hollywood, pues no le daban papeles debido a que era considerada como una mujer que estaba pasada de peso. Esto, de acuerdo a una entrevista con la revista Rolling Stone en 1996.
Por: Infobae
“Mi agente me lo dijo directamente, fue lo mejor que hizo en su vida, pero lo repugnante de Hollywood: no conseguía muchos trabajos porque ‘pesaba demasiado’”, narró.
A pesar de que este comentario la tomó desprevenida, Aniston se dio cuenta de que sus hábitos alimenticios no eran los mejores, por lo que decidió escuchar a su agente.
“Yo estaba como:’¡¿Qué?!’ Pero mi dieta era terrible. Batidos de leche y patatas fritas con salsa. Fue bueno empezar a prestar atención”, dijo.
Aniston tiene 51 años de edad, no solamente puso atención al comentario, pero no quitó el dedo de ese renglón en particular. Actualmente, además de ser conocida por su papel en “The Morning Show”, la actriz también es admirada por el increíble físico que ha mantenido.
En una entrevista con InStyle en 2012, la también productora explicó que se ejercita la mayor parte de la semana.
“Hago ejercicio casi todos los días, al menos cinco o seis días a la semana. Hago 40 minutos de cardio: giro, carrera, elíptica o una combinación de los tres. Luego hago Pilates un día a la semana, y además hago yoga, tres días a la semana. Intento mezclarlo”, reveló.
Cuando está de viaje, no deja que este se interponga entre ella y sus rutinas, y trata de encontrar tiempo para su físico mientras hace otras actividades.
“Me llevo pesas de ocho libras cada vez que me alojo en un hotel. Siempre es bueno hacer ejercicios para los brazos cuando miras televisión o hablas por teléfono. También me encanta estirarme antes de irme a la cama, y normalmente hago un par de abdominales”, agregó.
Pero, según lo que le explicó a la revista Well+Good hace dos años, la clave también está en no acostumbrar al cuerpo a unos cuantos tipos de ejercicios, sino hacer variaciones para mantener al cuerpo “confundido”.
“Hago esta clase de spin-yoga durante media hora y luego hacemos yoga durante 40 minutos. Eso es bastante intenso. Luego voy a un gimnasio, donde hago entrenamiento de fuerza o simplemente lo mío en la cinta, la bicicleta o la elíptica, solo para cambiar las cosas. Mantener tu cuerpo confundido es siempre la clave para mí […] Y es realmente bueno hacer sprints, entrenar a intervalos, porque es monótono hacer un ritmo”, declaró.
A pesar de que el yoga es uno de los deportes dentro de los que más se ha mantenido, el box es una pasión reciente que ha comenzado a disfrutar mucho. Pero esto no solamente por el intenso ejercicio, sino porque le ha ayudado a deshacerse de su “agresión”.
“El año pasado descubrí el boxeo, y me encanta. Es el entrenamiento más largo en el que me he quedado consistentemente, aparte del yoga. Hay algo sobre el aspecto mental del boxeo: los ejercicios, tu cerebro tiene que funcionar, no estás simplemente sentado en una bicicleta. […] Obtienes una liberación mental de toda esta basura que estás metiendo en tus oídos y ojos todos los días y tienes pequeños momentos de fantasía imaginando a quién estás golpeando”, dijo en 2018.
Pero no solamente se trata de mantenerse en la rutina del ejercicio, sino que hay que mantener la dieta en mente. La actriz se ha esforzado por mantener una dieta saludable para su cuerpo.
“Sigo una dieta baja en carbohidratos y sin gluten con muchas proteínas y verduras. Amo el pan de arroz integral con un poco de aceite de coco y sal marina encima. Es delicioso”, dijo a htcafe en 2015.
Además de ver lo que come, el año pasado Aniston también le dijo a Radio Times que se ha convertido en una firme creyente de los beneficios del ayuno intermitente, por lo que no consume “nada de comida en la mañana”.
Pero una vida sin sabor no es lo que busca, Aniston ama tener un día a la semana para descansar y comer lo que se le antoje: los domingos. Estos días son para disfrutar desde comida mexicana, hasta pasta.
Aunado a esto, los domingos también los considera como días de spa, y enfoca estos días en cuidar su mente y cuerpo a través del cuidado personal y en el que desintoxica su piel.
“Por lo general, hago un pequeño mini tratamiento facial en el que me doy un buen exfoliante, uso una máscara y luego el nuevo facial hidratante Aveeno”, explicó en 2017 a Shape.