El 5 de octubre pasado el hermano y el compañero sentimental de Amira Chavaro Enciso, una mujer de 74 años de edad, se inquietaron porque no aparecía. Ella vivía con su hijo, Eduardo Alfonso Parra Chavarro en el barrio Quinta Paredes de la localidad de Teusaquillo.
Al otro día, en la noche, tras la preocupación por desconocer su paradero, los
familiares decidieron acudir a la vivienda de Amira y Eduardo, pero al ver que nadie respondía, solicitaron el apoyo tanto de la Policía como de los Bomberos, y autorizaron su ingreso por la fuerza.
Según se supo, Parra Chavarro, cuya identidad fue revelada con una fotografía, y quien sería arquitecto, estaba en el lugar y habría negado varias veces la entrada a la casa, manifestando que su madre no estaba allí. Este hombre, según versiones preliminares, sufriría un transtorno mental.
“Al ingresar al inmueble, en el baño, la cocina y el patio fueron halladas manchas rojas, al parecer de sangre, y tejidos blandos. Fue entonces cuando al inspeccionar con detalle, las autoridades hallaron el cuerpo desmembrado de la víctima en la nevera, además de un cuchillo, una pulidora y un serrucho eléctrico (también con evidencias de tejidos y sangre)”, informaron en la Fiscalía.
Inmediatamente se realizó la captura en flagrancia de Parra Chavarro, quien en audiencias concentradas no admitió su responsabilidad.