Así viven los latinos las últimas horas de la batalla por la Casa Blanca

Así viven los latinos las últimas horas de la batalla por la Casa Blanca

Captura de pantalla.

 

Eliana Briceño votó por primera vez en Estados Unidos. Llegó desde Venezuela con sus padres cuando era una niña, su familia trabajó de sol a sol y ella también limpió baños, atendió restaurantes y peleó durante una década para ser ciudadana.

Por CNN Chile





CNN Chile y CHV Noticias acompañaron a Eliana a emitir su sufragio por adelantado. En el camino, emocionada contó: “tengo ganas de llorar de sólo pensar que por fin tengo este derecho. Mis padres vinieron y sacrificaron todo para yo poder tener una vida mejor y de sólo pensar en eso me dan tantas lágrimas”.

En su llanto no hay tristeza: “estoy súper feliz de poder usar este poder de votar y elegir un presidente que nos represente más a todos”, dice.

Sin embargo, el sistema electoral indirecto en EEUU ha hecho que muchos ciudadanos se sientan defraudados.

Rosa Sánchez es una de ellos. Trabaja en Uber y le molesta mucho que pueda ganar un candidato que obtiene menos votos de la gente, pero más delegados para el Colegio Electoral. “No se escucha la voz de la gente”, alega.

Eliana y Rosa no sólo elegirán presidente. Este martes también se renueva la Cámara de Representantes y algo clave: un tercio del Senado.

La cientista política Cassandra Sweet sostiene que “el elemento más importante de la noche del 3 de noviembre es el futuro del Senado. El Senado es fundamental, todas las políticas públicas pasan por ahí”.

Con cifras récord de voto por adelantado -más de la mitad del padrón total de 2016-, los resultados del 3 de noviembre podrían tardar. Trump ha sembrado dudas de si reconocerá una eventual derrota y algunos de sus partidarios contribuyen a la campaña del terror.

“¿Qué crees que Black Lives Matter y Antifa hará si Trump gana? Harán protestas y destruirán tiendas, como ellos hacen. Herirán gente y matarán policías”, dice Cindy Bortreat, votante de Trump.

Pero el ex gobernador de Maryland y ex precandidato presidencial demócrata, Martin O’Malley, no está preocupado: “creo que el margen en el voto popular y los 250 años de historia americana republicana serán suficientemente fuertes para el que no tenga otra opción que aceptar la realidad”.